Por Luisa García Pelatti
Los casos positivos de COVID-19 se han reducido tras alcanzar un pico de 20,161 en noviembre, un promedio diario de 672. En enero se registraron 9,561 casos (un promedio diario de 368), una caída de 53% en dos meses. Los casos tienen que seguir bajando antes de poder hablar de que la pandemia está bajo control, advierten el doctor Ibrahim Pérez y la demógrafa Judith Rodríguez en su análisis semanal de los casos de COVID-19.
Los casos empezaron a bajar a mediados de diciembre tras llegar a los 800 casos diarios. La semana pasada los casos positivos fluctuaron entre los 200 y los 300.
El número de pacientes de COVI-19 hospitalizados se redujo a 279 el 29 de enero, comparado con 657 pacientes el 9 de diciembre, una caída de 58% en seis semanas. Es la primera vez desde octubre que el número de pacientes cae por debajo de 300 en un día.
Los pacientes en intensivo, que alcanzaron un nivel récord de 110 el 23 de noviembre, han bajado a 46 el 18 de enero.
El número de fallecidos ha disminuido a un promedio de 7.2 por día, frente a un promedio de 12.8 muertes en diciembre.
“Aunque el futuro inmediato luce esperanzador, el dominio final de la pandemia dependerá de nuestro comportamiento y disciplina. No podemos volver a bajar la guardia y dejar escapar el notable progreso alcanzado”, señalan los expertos.
“No podemos entusiasmarnos prematuramente con que el regreso presencial a la Escuela y la flexibilización total están a la vuelta de la esquina. Es ahora cuando más cuidado sostenemos que ser con las próximas órdenes ejecutivas gubernamentales de flexibilización. No podemos echar a perder todo lo logrado. Tenemos que continuar cumpliendo con las medidas preventivas anti-COVID en lo que la vacunación alcanza el porcentaje poblacional óptimo que finalmente nos protegerá a todos”, explican.