Por redacción de Sin Comillas

El número de casos de COVID-19 se ha disparado este mes después de que el mes pasado la incidencia cayera a 42 por 100,000 habitantes, un nivel moderado. La incidencia (el número de casos nuevos confirmados y probables notificados durante un periodo de 7 días por cada 100,000 habitantes) se situó en 216.2 el 16 de abril, pero había llegado hasta 271.7 tres días antes, el nivel más alto desde el 1 de febrero, en el final de la ola de la variante ómicron.

La subvariante BA-2 ha provocado un aumento de casos que ha teñido de rojo el mapa de transmisión comunitaria. El rojo es el nivel de  transmisión comunitaria más alto. Hace unos días el mapa tenía la mayoría de los municipios en amarillo o naranja, nivel moderado o sustancial, y 29 municipios tenían un alto nivel de transmisión comunitaria.

Ayer el gobernador Pedro Pierluisi reconoció que estamos en medio de un repunte de casos de COVID-19 y anticipó que el Departamento de Salud podría establecer restricciones en actividades multitudinarias.

Desde el 10 de marzo, el Gobierno eliminó la obligatoriedad de llevar mascarillas en interiores y exteriores, con algunas excepciones, aunque recomienda utilizarla en interiores si no se pueda confirmar que todos estén vacunados.

El año empezó con una tasa de incidencia de COVID superior a los 2,000 casos por 100,000 habitantes y se redujo de forma sustancial hasta alcanzar los 42.11 el 15 de marzo, un nivel moderado de incidencia, según los parámetros del Departamento de Salud. La incidencia actual (78.25) está en un nivel sustancial (50.0 a 99.9).

La tasa de positividad (el porcentaje de todas las pruebas de RT-PCR positivas) se elevó ayer a 19.1%, la más alta desde finales de enero. Había 127 personas hospitalizadas, 33 de ellas eran menores.

El 29 de marzo, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) autorizó un segundo refuerzo de la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech y Moderna para los mayores de 50 años y personas con inmunodeficiencia. La dosis, la cuarta que se inocula a la población, es opcional. Casi 2.7 millones de personas se han puesto dos vacunas, lo que representa el 86.8% de las personas mayores de 5 años.