Opinión

Por Alberto L. Martín Rivera*

Las acciones

El problema de las acciones de una cooperativa estriba en definirlas bajo las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) para cumplir universalmente con una contabilidad homogénea. En este sentido, cabe señalar que las NIIF, han sido elaboradas por y para sociedades capitalistas convencionales. En nada toman en consideración el principio “adhesión voluntaria y abierta” donde se permite el derecho de reembolso de las aportaciones al capital social por el socio.

Se tiene el derecho de reembolso y a la misma vez se le exige tener un capital social exigible, entonces podemos determinar, en su movimiento, un porcentaje de estabilidad. Este balance estable debe al menos considerarse como parte del capital patrimonial, siendo el primer fondo de seguro siguiendo con las reservas como segundo fondo de seguro ante los ahorristas y terceros en general. Esto es una sugerencia para no determinar todas las acciones como pasivo. Las acciones de las cooperativas tienen una múltiple caracterización que incluye aspecto de patrimonio social, por lo que se podría determinar un porcentaje de balance fijo ante un NIIF que quiere retirar todas las acciones a la sección del pasivo. La definición o características de una acción de la cooperativa es una de las fuentes primarias para la seguridad de los terceros.

El efecto de retirar las acciones del patrimonio reduce sustancialmente su índice del 28% actual a un 7.4%. La sugerencia del 10% no es un dato fijo. Se podría lograr alcanzar un 25% (en caso de reclasificar todas las acciones al pasivo). Sobrepasar esta reserva de un 25% puede limitar su índice de liquidez y, por ende, afectar su rentabilidad. En otros países este índice se eleva a un mínimo del 20%, primeramente, por las tasas activas que ejercen en sus socios/cliente, y éstas varían en no menos del 30%. El riesgo es alto, el índice tiene que ser alto.

Reservas

Nuestras cooperativas tienen que aumentar sus reservas que no son exigible. Lo digo y lo sigo diciendo. Actualmente sus índices son sensitivos ante los cambios contables venideros. Es lamentable que las cooperativas hayan entrado en una competencia directa con la banca, lo que ha llevado a tomar decisiones cuestionables, como no asignar tasas activas y pasivas en forma equitativa. Por ejemplo, si la banca paga en un certificado de ahorro, como un especial, un 3.75%, ¿por qué las cooperativas tienen que pagar 5.75%? Si un banco cobra en los financiamientos el 7.75%, ¿por qué las cooperativas tienen que ofrecer 3.75%? No existe equitatividad entre ambas tasas. Sobre todo, se le está enseñando al socio que las cooperativas están para pagar altas tasas pasivas y cobrar bajas tasas activas. Este no fue su origen, las cooperativas nacieron ante la “explotación” del trabajador sin oportunidad financieras de crecimiento y desarrollo. Por lo tanto, las cooperativas deben ser un instrumento de servicio y no de competencia bancaria. Este ejercicio no permite alimentar las reservas adecuadamente porque el esfuerzo está en pagar dividendo, “enriquecer al socio”, que es una forma de debilitar las reservas. No puedes levantar una sana rentabilidad con tasas tan dispares. Las cooperativas federales están en la misma situación sensitiva en sus reservas. Tomando a tres cooperativas como ejemplo, su índice de capital es 8.82% promedio. No hay mucha diferencia con las locales.

Inversiones

Quiero señalar que no violento las normas de contabilización de las inversiones, pues éste fue lamentablemente un ejercicio fútil de las cooperativas que han pagado el precio de su ejercicio operativo. No se puede negar, sino afrontarlo. Somos responsables de nuestros actos. La junta de directores y su presidencia de cada cooperativa han sido responsable de su ejercicio. Lamentablemente vuelven de nuevo aumentar sus índices de inversión acumulando perdidas contingentes no realizadas sin tener reservas para ello, ni tener el conocimiento especializado tanto del personal como del sistema. El mundo de las inversiones es algo muy especializado, delicado y de exigencia de expertos. Conocimientos elementales en inversiones comprometen a la cooperativa.

Este problema de inversiones no fue contable, fue administrativo, que lo resolvieron con leyes y reglamentos. Cada cooperativa debe afianzar sus reservas para estar posicionada antes situaciones critica.

Nuevamente señalo que Corporación para la Supervisión y Seguro de Cooperativas (COSSEC) debe revisar el índice permitido para invertir reduciendo el mismo de un 30% a un 15% y razones las hay.

Responsabilidad Administrativa

Dice un banquero: “No existen crisis bancaria, existen bancos mal planeados, mal dirigidos, y en algunos casos, deshonestamente administrados. …en una economía de mercado cada empresa debe ser responsable de sus propios actos, sin que la comunidad, en general, o la de un determinado sector económico, en particular, tenga que acudir a resolver los problemas creados por una administración incompetente, culposa y, a veces, hasta delictiva, de determinados administradores”. Don Emilio Botín-Sanz de Sautuola y García de los Ríos, expresidente Banco Santander.

Tanto la banca, bajo la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés), como las cooperativas, bajo la Administración Nacional de Cooperativas de Crédito (NCUA, por sus siglas en inglés), tuvieron y siguen con ayudas federales. ¿Por qué? Los índices son resultados de una sana administración, por lo que son ellos los que nos dan las sorpresas de la ineficacia. Esto es una de las razones por lo que las instituciones fracasan por una mala o una deshonesta administración, como fue el caso de los bancos suizos y americanos. La falta de cumplimiento del control interno es una falla administrativa que está estructurada para detectar las malas prácticas contables y administrativas. Al menos en los estados financieros de las cooperativas se “cualifican” en su opinión dando detalles de éste.

La diferencia en las cooperativas es que la responsabilidad cae en la Asamblea, Junta de directores y presidente ejecutivo. Si nuestros socios no toman interés en estas reuniones es un problema de la cooperativa y del propio socio. La ley específica la responsabilidad de cada uno de sus miembros principales. Se presenta la responsabilidad del socio también. Que este no tome su responsabilidad, en parte, puede ser culpa de la Junta de directores al no orientar y educar al socio. Pero esto no exime al socio de ejercer su responsabilidad y no esperar que todo se lo den. Que aprenda que las asambleas no son “show” de entretenimiento. Que sus directores en esas asambleas presenten datos estadísticos sobre los temas más relevante, liquidez, riesgo crediticio, solvencia, rentabilidad, riesgo operacionales y proyecciones. Por experiencia NADA DE ESTO SE TOCA EN LAS ASAMBLEAS. Son temas de desarrollo cultural y en los análisis financieros solo se comentan los aumentos o disminuciones, sin explicación del por qué. Nadie siquiera pregunta por qué los estados financieros se cualifican.

Resumiendo

Las cooperativas deben aumentar sus reservas en una sana distribución de utilización y propósito, reducir la cartera de inversiones, aumentar la cartera crediticia en forma prudente, regular sus tasas activas y pasivas. Elegir miembros a la junta de directores por su capacidad, experiencia, preparación y disponibilidad de educarse en conocimiento básicos de finanza, economía y riesgo crediticio.
En fin, observo fallas administrativas, no de metodología contable. Si COSSEC quiere, y así lo considero, continuar como la supervisora de las cooperativas tiene que revisar su metodología de análisis financieros y ser rigurosa en el cumplimiento de índices importantes.
COSSEC recibe los estados financieros de las cooperativas, cuán vigilante, cuán exhaustiva, con cuán rigurosidad sea en su análisis financiero, no lo sé. Pero por observación tiene que mejorar su sistema de medición a las cooperativas. Aumentar su ejercicio de auditoria como lo ha hecho en el área de cumplimiento.

  • El autor es un empleado retirado de la banca comercial, con una experiencia de 40 años de servicio.