Opinión

Por Alberto L. Martín Rivera*

Ante las condiciones deplorables en el sector laboral, a través del siglo XIX surgieron grandes pensadores para combatir el sistema económico y social injusto de la época, dando paso a la creación de un sistema económico y social basado en la ayuda mutua y asociación. Ese movimiento se llamó cooperativismo. Su atención fue tan firme que se fue desarrollando hasta lograr los grandes movimientos actuales y Puerto Rico no ha sido una excepción.

Aunque sabemos que ha habido cierres y fusiones de cooperativas, no significa que una debilidad financiera, en ocasiones, bien definida, significa una victoria en su unión porque su estructura financiera se fortalece.

Por ejemplo, para el 1990-91 había 238 cooperativas de ahorro y crédito (CAC), con 2,186 empleados, 687,884 socios, $988 millones en activos totales. Luego, entre cierres y fusiones, en el tercer trimestre de 2024 tenemos 92 cooperativas que generan aproximadamente 3,184 empleos, cuenta con 1,152,137 socios, con un valor de activos de $12.1 millones.

Debo mencionar como un dato importante que, al observar el volumen de negocio de las CAC en medio de un mundo competitivo con otras instituciones financieras, nunca observaremos un retroceso en su crecimiento, sino un crecimiento sobresaliente en sus últimos veinte años. Veamos algunos detalles más cercanos.

El grupo CAC presenta un crecimiento en activos total frente a tercer trimestre de 2024 de 2.70%. Este aumento responde básicamente a la participación en los depósitos de 97.9% con un crecimiento de 2.68% comparado al cierre de 2023, dando recurso para la colocación en activos productivos como lo es la cartera de préstamos que componen el 60.9% de los activos totales.

Con la captación de fondos ajenos ha logrado un crecimiento en su sanidad financiera (liquidez), con una relación de préstamos a depósitos (Loan to deposit ratio) de un 85.3% a 2023 con un salto a 87.1% a T3-24. Recordando siempre tomar en consideración un índice ideal no más del 90% para no comprometer su liquidez. Hay que tener cuidado, ya que de continuar este aumento obligará a las cooperativas a buscar financiamientos que pueden comprometer los beneficios rentables logrados.
Digo esto porque si no se logra manejar el rendimiento de la cartera de riesgo con las nuevas formas de financiación se afectarán los sobrantes y la alimentación del capital.

Estas fuentes amplían el margen de liquidez, pero, por otro lado, van limitando su capacidad de endeudamiento para enfrentar situaciones adversas. Por lo tanto, si no se logra una combinación sana en la colocación con un buen rendimiento y la captación no gestionada pueden presentarse, eventualmente, antes situaciones internamente adversas. No se debe agotar la capacidad de endeudamiento, tiene que haber un margen en estos riesgos para momentos no atractivos.

La cartera crediticia presenta un aumento de 4.82% en el tercer trimestre, gracias a los desembolsos de $590.7 millones con la participación de 41,314 socios/clientes. Su cartera de mayor movimiento en los últimos tres trimestres del 2024 son los comerciales, con un aumento de 8.09%, con un aumento a 11 años de 214.3%. Presenta un cierre en morosidad de 3.11%, aceptable, pero de atención. Esta cartera en sus últimos seis años presenta una morosidad promedio de 2.88%.

La cartera de préstamos presenta un interés ponderado de 7.27%, siendo más alto al cierre de 2023 de 7.16%. La diferencia mínima observable posiblemente responde a continuas ofertas de tasas muy baja en todos los renglones del crédito, sin ecualizar los costes financieros que han aumentado de 0.73% al cierre de 2023 a un golpe de 0.97% en el tercer trimestre de 2024.

Solo se logrará aprovechar la baja de intereses por la Reserva Federal con un interés real de la cooperativa, a lo que me refiero, adecuar la tasa del activo y la del pasivo, controlando los especiales para ocasiones particulares. Además, deberá tenerse presente el control de la cartera emproblemada que no devenga intereses a tiempo siendo la de mayor riesgo que presenta un índice moroso de 2.18% al 2023 con cierre de 2.45% en el tercer trimestre de 2024, con una protección de su reserva con índice de 1.21. Esto es una baja al cierre de 2023 que presenta un índice de 1.35. Creo que las cooperativas deben aumentar este índice de cobertura ante el panorama político local como internacional.

Por otro lado, el crecimiento acelerado en el riesgo del crédito para los últimos 10 años las cooperativas deberán mantener un buen manejo en el riesgo de liquidez por varias razones. Entre ellas, el alto coste financiero, incluyendo, como un nuevo atractivo, las fuentes de fondo por emisiones de instrumentos negociables (con las excepciones estipuladas por la Ley 255) como lo es acciones preferidas, obligaciones de capital, en fin. Una disminuye el capital y la otra aumenta el coste financiero.

Otro aspecto de atención es la razón de gastos de 69.9% al 2023 con un salto a 80% en el tercer trimestre de 2024. Hay necesidad de reducir los gastos totales para lograr un mayor rendimiento y tener suficientes fondos para alimentar las reservas de capital. De hecho, su índice de rendimiento (ROA) cerró en el tercer trimestre en 1.57%, una disminución en el índice de 2.18% del 2023. Esta disminución responde, básicamente, al aumento en las provisiones para pérdidas posibles sobre la cartera emproblemada que ha sido causada por la falta de pago de sus socios que se han visto forzados a utilizar sus reservas para cubrir sus gastos ordinarios por el constante aumento en los precios de productos de consumo y artículos de alta necesidad. Además, la aplicación de los principios de contabilidad generalmente aceptados (GAAP) con el método “Current Expected Credit Loss” (CECL), que ha ejercido un efecto aumentativo significativo en sus provisiones para pérdidas ya comentado en otros artículos aquí presentados, dando como resultado una baja al rendimiento afectando la alimentación adecuada de sus reservas de capital.

Pero, aun así, las reservas o capital social real (CSR, incluyo sobrante y valores de inversión) aumentaron de un 7.40% a 8.15% cierre del tercer trimestre de 2024, fortaleciendo su valor. Sin embargo, no pasemos por alto que este aumento tuvo su impacto gracias a las ayudas de los fondos CDFI que impactaron en esta.

Considerando el índice de capital indivisible como la principal medida de fortaleza financiera por su definición y características (ya comentado en artículos anteriores) sobre activos totales (CIAT, no promedio), convirtiéndose en el colchón financiero o fondo de seguridad de mayor evidencia de estabilidad financiera de una cooperativa, el índice fue de 0.47%, equivalente a un aumento de $1.8 millones. Hay necesidad de aumentarlo y no limitarse a las aportaciones mínimas requeridas por Ley, arrojando un índice actual de 3.26%, siendo menor a 2023 de 3.33%.

La seguridad de este índice CIAT es que no se ve afectado por el movimiento de entradas y salidas de las “otras reservas” manteniendo un índice estable. Las “otras reservas” pueden tener la movilidad, como ejemplo, desarrollo de facilidades físicas, desarrollo tecnológico, desarrollo de nuevos productos, en fin, afectando el índice.

Nuestro índice de estabilidad financiera considera los índices de mayor atención, como la liquidez, solvencia, préstamos emproblemados y la rentabilidad, colocando al grupo Corporación Pública para la Supervisión y Seguro de Cooperativas (COSSEC, me refiero a las CAC) con un índice numérico de 1.5645 para una calificación de 0.76, aceptable. Al cierre de 2023 presentó una posición numérica de 1.4391 para una calificación de 0.80, bueno (luego de haber ajustado por la carta informativa emitida 2024-06 A por COSSEC). La baja responde al aumento en la morosidad, baja en el índice ROA y el índice en solvencia.

La estabilidad financiera cumple con facilitar el uso eficiente de los recursos de las cooperativas. Ante los vientos tristes del oriente y la política de Estados Unidos, es necesario mantener una constante evaluación y administración de los riesgos financieros y determinar la capacidad de absorber y mitigar situaciones de perturbación externas e internas. ¿Cuánto tiempo tomará esta situación del oriente? No lo sabemos. Cierto que las cooperativas se encuentran con niveles apropiados de liquidez y capital, pero esto no significa la dejades del análisis financiero y administrativo constante.

Los índices señalados son altamente prioritarios en la gestión de supervisión por COSSEC. Esperamos que COSSEC tenga varios escenarios de evaluación. Esto es un tema muy amplio, pero necesario.

Esperamos que COSSEC cumplan las palabras de su presidenta ejecutiva Maribel Jiménez que dijo y citamos: “Continuaremos trabajando en estrategias que fortalezcan aún más este importante sector, clave para el desarrollo económico de nuestra isla”.

  • El autor es un empleado retirado de la banca comercial, con una experiencia de 40 años de servicio.