Ayudar a los compradores para estimular la venta de viviendas nuevas, facilitar las ventas al incentivar el mercado de alquiler para las viviendas existentes, evitar que más unidades se añadan al inventario ayudando a las familias en riesgo de ejecución y promover entre inversionistas extranjeros las viviendas de precios más altos. Esta es la múltiple estrategia de la Autoridad para el Financiamiento de la Vivienda (AFV), que ayer hizo un balance de sus resultados. Los primeros tres estrategias parecen estar funcionando, pero reducir el mercado de viviendas de precios más alto podría requerir más tiempo.
Los programas de estímulo a la vivienda de AFV han permitido vender 19,168 viviendas, unas 3,712 de ellas viviendas de nueva construcción, informó George Joyner, director ejecutivo de AFV. “La tendencia es positiva desde septiembre de 2009, no sólo en las unidades existentes, también en viviendas nuevas”, indicó Joyner, que calificó como “un logro bien grande” el hecho de que en los últimos cinco meses las ventas de viviendas nuevas hayan mantenido un ritmo mensual en torno a las 300 unidades. El programa Mi Nuevo Hogar, que recibió una aportación de $40 millones, comenzó en septiembre de 2010 y tenía vigencia hasta 30 de junio. Después fue extendido cuatro meses más al recibir $20 millones adicionales, provenientes del uso de los fondos no reclamadas de los bancos.
Joyner destacó que mientras en Estados Unidos las ventas han mostrado una tendencia a la baja, en Puerto Rico las ventas han mostrado una tendencia ascendente.
Los datos muestran las ventas hasta el mes de julio, cuando se vendieron 317 viviendas nuevas con ayuda de los incentivos y 1,152 existentes, para un total de 1,469 viviendas. De éstas, 731 compradores –alrededor de la mitad– se beneficiaron de los dos programas de estímulo: el bono para gastos de cierre y la segunda hipoteca.
Entre abril y junio de este año se vendieron un total de 1,234 unidades de vivienda nueva, según datos del Construction & Sales Activity Report. Los diferentes programas de estímulo impulsaron la venta de 1,162 unidades, lo que representa el 94% de las ventas totales.
Joyner destacó que cuando dispongamos de los datos de los meses de agosto, septiembre y octubre se podrán comparar con el mismo período del año pasado, cuando ya el estímulo estaba en vigor.
El precio promedio de las viviendas que se benefician de los bonos es de $136,000.
“Seguimos la misma estrategia de ofrecer incentivos a aquellas familias que les falta el efectivo para cerrar la transacción y a la vez proveyendo otros incentivos que tienen un costo marginal para el fisco”.
Joyner también ofreció los resultados preliminares del programa “Protegiendo Tu Hogar”, que ayuda a las familias en riesgo de perder su hogar. De las 1,500 solicitudes, unas 1,200 familias cualificaron. Se han llegado a acuerdos con las instituciones financieras en 900 casos y ya se han cerrado 100 casos.
El funcionario explicó que el promedio de ayuda que han tenido que dar ha estado en torno a los $10,000, la mitad de los $20,000 que se contemplaba en un inicio. Se asignaron $20 millones para este programa. Esto se debe a que las ayudas se han combinado con los programas de mitigación de los bancos y los inversionistas propietarios de las hipotecas. Los bancos han reestructurado hipotecas, han bajado intereses, han alargado los términos y han condonado cargos por moras y gastos legales. “La respuesta de los bancos ha sido bien positiva”.
“Hemos hecho estos arreglos de forma individual”. En la mayoría de los casos, las familias no tendrán que preocuparse por la hipoteca durante los próximos 11 meses, hasta que resuelven, pero en algunos van a tener que vender sus hogares, advierte Joyner.
El aspecto más difícil de la estrategia de la AFV es poder atraer inversionistas a gran escala para la compra de viviendas de nueva construcción. La dificultad, asegura Joyner, está en “la ventana corta de tiempo”, 10 meses. “No fue hasta febrero o marzo de este año que muchos se dieron cuenta de estos beneficios y ya era muy corto el tiempo”. Joyner asegura que están trabajando con este tema.
Joyner se defendió de las críticas que señalan que los programas de estímulo están ayudando a rescatar al sector de la construcción de vivienda, que creó una burbuja inmobiliaria.
“Lo que estamos buscando no es salvar al sector, sino estabilizar el sector de bienes raíces. No habrá una recuperación económica si no se recupera el mercado de vivienda”, aseguró Joyner.
Los interesados pueden obtener información sobre los programas de ayuda de la Autoridad para el Financiamiento de la Vivienda llamando al 1-855-884-6427 o al 1-855-TuHogar.