Por redacción de Sin Comillas

La invasión de Ucrania ha borrado las perspectivas de una sólida recuperación económica mundial, al menos a corto plazo. Los economistas auguran un alza en los precios de los combustibles, lo que elevará la ya alta inflación.

Si los precios de la energía siguen subiendo, la economía mundial podría entrar fácilmente en una segunda recesión en tres años, advierten. El impacto dependerá de la duración y de la gravedad del conflicto. Pero dicen que la ralentización del crecimiento económico será inevitable.

Europa depende en gran medida del gas procedente de Rusia y, si se cortan los gasoductos, no podrá encontrar suministros alternativos de forma inmediata. La preocupación más inmediata es el impacto de la crisis en el precio del petróleo, el gas y otras materias primas. Una fuerte subida aumentaría la inflación y afectaría a los consumidores. Los precios del petróleo podrían subir hasta los $140 por barril

El peligro de un aumento en la inflación aumentaría la presión sobre los bancos centrales para que suban las tasas de interés. La Reserva Federal de Estados Unidos ya adelantó que podría empezar a aumentar las tasas a partir de marzo para controlar la inflación.