Coca-Cola, el mayor fabricante de refrescos del mundo, ganó $8,741 millones en los nueve primeros meses del año, lo que supone un 16% más que un año antes, gracias al avance de su negocio, especialmente en América Latina y a la subida de sus precios, cercana al 10%.
Sólo en el tercer trimestre del año, la empresa, propietaria también de marcas como Fanta, Sprite, Aquarius, Nestea o Minute Maid, aumentó sus ganancias un 9% hasta $3,087 millones, y su facturación un 8%, hasta $11,953 millones.