Por Luisa García Pelatti

Noviembre ha sido el mes más letal de la pandemia, con 8 muertes diarias y más de 600 pacientes hospitalizados. Por primera vez en la pandemia se alcanzó un promedio diario de 581 casos en una semana. Ayer, día de Acción de Gracias, los datos oficiales del Departamento de Salud “nos colocan justo al borde del precipicio”, alertan el doctor Ibrahim Pérez y la demógrafa Judith Rodríguez al analizar lo datos más recientes sobre COVID.

Ayer, con 11 días de retraso, nos enteramos que en la semana del 9 al 15 de noviembre se registraron 4,070 casos positivos, superando el por primera vez los 4,000 casos semanales. En las últimas siete semanas los casos no han bajado de 2,000. Ha habido dos semanas con más de 3,000 y ahora son más de 4,000 casos. “Ha sido el repunte más cuantioso y prolongado de toda la pandemia”, señalan Pérez y Rodríguez.

“Seguimos esperando infructuosamente que funcione algo de lo que no ha funcionado por los pasados cinco meses, desde mediados de junio. No ha funcionado ni lo decretado en las órdenes ejecutivas del gobierno, ni las súplicas hechas en favor del buen comportamiento ciudadano. La pandemia ha continuado imparable y no ha respondido a los paños tibios que se le han aplicado. Haciendo lo mismo mes tras mes no ha rendido frutos”, comentaron.

“¿Es que hay que esperar que colapse nuestro sistema médico-hospitalario para actuar más agresivamente y evitar más muertes innecesarias?”, se cuestionan.