Agencias
El presidente de la Reserva federal (Fed), Ben Bernanke, reieteró ante el Congreso de Estados Unidos que la institución que preside está preparada para actuar, pero no ha dejado claro ni cuándo ni cómo, lo que provocó la caída de las bolsas a ambos lados del Atlántico.
En un discurso preparado ante los miembros del Congreso, el máximo responsable del banco central estadounidense ha apuntado unas perspectivas económicas más débiles, principalmente en el mercado laboral. Dijo que la economía, luego de crecer a un ritmo anual de 2.5% en el segundo semestre de 2011, se desaceleró a un 2% en el primer trimestre de este año y que posiblemente se frenó más en el período de abril a junio. Consideró que la economía tendría una expansión moderada, que sin embargo disminuiría si se complica la crisis crediticia en Europa o si el Congreso estadounidense no atiende la inminente crisis presupuestal antes de que termine el año.
Bernanke ha insistido en que la Fed “ya ha dejado claro” que está dispuesta a adoptar nuevas medidas de estímulo para garantizar la recuperación económica de EEUU, que ha calificado de “frágil”. En su discurso, Bernanke ha señalado que es muy probable que en los próximos meses la reducción de la tasa de desempleo sea “lenta y frustrante”. Además, ha advertido de que los últimos datos macroeconómicos han sido “en general decepcionantes”.
El presidente de la Fed ha instado a los miembros del Congreso a actuar de inmediato para hacer frente a los problemas fiscales que se avecinan en EEUU. Bernanke ha advertido de los riesgos que implica la falta de acuerdo entre los dos principales partidos políticos para reducir el ritmo de endeudamiento del país. En caso de que no haya acuerdo en el Congreso para equilibrar las cuentas públicas, EEUU sufrirá “una moderada recesión” a principios de 2013 y el ritmo de creación de empleo se resentirá aún más.
Bernanke también ha apuntado a la crisis de deuda de la que atraviesa la zona euro como una amenaza significativa para la economía estadounidense. Los riesgos al crecimiento económico han aumentando debido a la tensión en los mercados financieros y en las economías europeas”, ha apuntado.
Ante esta situación, Bernanke ha asegurado que la Fed estudia posibles herramientas para hacer frente a la debilidad económica. En este sentido, el funcionario estadounidense ha aclarado que las medidas de política monetaria del banco central aún son efectivas.
“Como reflejo de su preocupación por el lento progreso en la reducción del desempleo y ante los riesgos a la baja de las perspectivas económicas, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC por sus siglas en inglés) dejó claro en su reunión de junio que está dispuesto a tomar las medidas que correspondan con el objetivo de promover aún más una recuperación económica más fuerte, así como la mejora sostenida de la condiciones del mercado laboral en un contexto de estabilidad de precios”, dijo.
En su última reunión del 20 de junio la Reserva Federal dejó estables los tipos de interés y decidió prorrogar su programa de compra de bonos (denominado Operación Twist), por un valor de $267,000 millones, hasta finales de este año.