Por redacción de Sin Comillas

“A pesar de los progresos significativos que ha hecho el Gobierno en el área fiscal en los últimos dos años, la estabilidad financiera continua deteriorándose. En los próximos años, creemos que es probable que se produzca la reestructuración o el impago de la mayoría o la totalidad de la deuda”, opina la firma Janney Capital Markets en un informe publicado el jueves.

“Creemos que Puerto Rico tiene de uno a tres años antes de que la carga de aumentar los gastos haga imposible presentar un presupuesto balanceado. En ese punto, la reestructuración de la deuda puede ser un camino convincente para el liderazgo político si las alternativas son reducir los servicios del Gobierno y recortar los pagos de pensiones”. En el año 2016, el servicio de la deuda será de alrededor de $3,600 millones, al que hay que añadir $1,300 millones de las corporaciones públicas. “Esos $5,000 millones anuales del servicio de la deuda será una razón importante cuando el liderato político tenga que decidir qué pagar”.

Al igual que Moody’s, Janney Capital Markets cree que la Autoridad de Energía Eléctrica no podrá pagar los $400 millones del servicio de la deuda el 1 de julio de 2015. El pago podría afectar a otras deudas del Gobierno, incluyendo las Obligaciones Generales y Cofina (Corporación para el Fondo de Interés Apremiante).

Por eso augura un “futuro sombrío” para los bonistas. “Si asumimos que el estancamiento económico continúa y dado el crecimiento de los gastos en los próximos años (retiro, gastos médicos y servicio de la deuda), el déficit del presupuesto aumentará, y cada vez será más complicado aumentar los ingresos  para pagar los gastos”, advierte. Cuando el Gobierno se encuentre ante la opción de decidir entre pagar a los bonistas o reducir los gastos del Gobierno de forma sustancial, Janney Capital opina que el Gobierno podría elegir reestructurar deuda, que podría incluir los bonos de Obligaciones Generales y quizás la deuda de Cofina. La pregunta ya no es si habrá reestructuración de la deuda, sino cuándo y cómo será.

Sobre la reforma contributiva propuesta por el Gobierno, opina que la resistencia a la implantación del IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido) añade incertidumbre sobre el futuro de los recaudos.