Algunos funcionarios de la Reserva Federal insistieron en agosto en un nuevo programa de estímulo ante la desaceleración económica de Estados Unidos, pero tuvieron que conformarse con la promesa de que Fed mantendrá por otros dos años casi en cero su tasa básica y acordaron considerar alternativas adicionales durante una reunión de dos días en septiembre.
Las minutas de las discusiones del 9 de agosto indican que los funcionarios de la Reserva Federal consideraron numerosas alternativas, incluyendo una nueva recompra de bonos soberanos por parte de la Tesorería. Algunos funcionarios de la Fed creen que una economía débil requiere otro programa de estímulo.
Sin embargo, esos funcionarios tuvieron que conformarse con mantener la tasa casi en cero hasta fines mediados de 2013. Además, prolongaron en un día su reunión de septiembre, dando a entender que el banco central podría anunciar nuevas medidas tras ese encuentro.
Tres miembros de la Reserva Federal se opusieron a cualquier medida de estímulo por temor a un repunte de la inflación. La votación de 7-3 tras la reunión fue la primera en casi 20 años que por lo menos tres miembros no concordaron con la declaración de la Fed.