Por redacción de Sin Comillas

Los fondos para el programa “Mi Casa Propia”, que provee ayuda en gastos hipotecarios a personas de escasos recursos para la compra de un hogar, están a punto de agotarse, lo que a juicio de Roberto Trápaga, residente de la Asociación de Constructores de Hogares (ACH), podría tener el efecto de provocar una parálisis en la venta y construcción de proyectos de interés social y vivienda asequible. Hasta el momento más de 58,000 familias se han beneficiado del Programa “Mi Casa Propia”.

“Reconocemos que el Gobierno se encuentra en estos momentos en una difícil situación fiscal. No obstante, es importante que se identifiquen fondos lo antes posible para proyectos de gran impacto social y económico como lo es el de “Mi Casa Propia” de manera que no sólo los compradores de vivienda económica puedan adquirir su propiedad sino, además, asegurar que los desarrolladores podamos construir vivienda asequible que pueda ser adquirida”, expresó el presidente de la ACH.

Trápaga indicó que el Programa “Mi Casa Propia” es un ejemplo claro donde la inversión del gobierno es transparente, ya que no gasta el dinero hasta tanto la inversión se da y lo pone en manos directos del comprador y no a través de ninguna empresa de construcción. “No estamos hablando ya de incentivos para inventario ni pidiendo que subsidien las ineficiencias que pueda tener el sector como pasa en otros sectores de la economía. El enfoque ahora es atender con construcción nueva el área donde hay necesidad que es en vivienda asequible. No podemos perder de vista que ese comprador necesita la asistencia del gobierno para convertir esa necesidad en una demanda efectiva”, mencionó Trápaga.

“Lo que estamos solicitando es que se le permita la continuidad a un proyecto que ha sido exitoso, que se ha demostrado que va directo a beneficiar al consumidor de escasos recursos que quiere hacerse de un hogar propio y seguro”, acotó Trápaga. 

El presidente de la ACH aprovechó, además, para resaltar que el presidente de la Comisión de Vivienda, Carlos Vargas, en un esfuerzo bipartita, ha estado impulsando legislación que asigne los fondos necesarios para dicho programa. De igual forma, señaló la ACH pudo validar ante el presidente de la Comisión de Hacienda, Rafael Hernández, la costo efectividad de dicho programa así como a miembros de ambas delegaciones políticas de dicha Comisión.

“Hemos podido evidenciar tanto en vistas públicas como en los diferentes foros que hemos asistido recientemente que cada dólar que el Gobierno invierte en este programa, le revierte positivamente al Gobierno porque le devuelve su costo completo y le deja un saldo positivo y, adicional a eso, promueve toda la actividad económica y activa el sector de la construcción, vital para la reactivación de la economía”, sostuvo Trápaga.

Según datos de la firma Estudios Técnicos, el bono que provee “Mi Casa Propia” representa una aportación del gobierno de entre 3 y 4 centavos por cada dólar de inversión privada. “Así que en esencia, el Gobierno no entra y participa pero, el bono es lo que va permitir que el cliente pueda cualificar y comprar la vivienda asequible que hay actualmente en el mercado y que son las que mayor demanda tienen”. 

A modo de ejemplo señaló que en el año fiscal 2012 el impacto económico de nueva construcción de vivienda fue de $242,000 en ingresos fiscales por cada millón de inversión por concepto de construcciones y otras cargas fiscales (13.6% de la inversión), $100 millones en contribuciones y otras cargas fiscales y $10 millones en aportaciones de infraestructura.