Por redacción de Sin Comillas
El mercado de la vivienda mejoró entre el 2017 y el 2018, tras recuperarse del impacto del huracán María, con un 78% de aumento en ventas de residencias nuevas y un 17% de alza en casas revendidas, informó Estudios Técnicos, Inc.
A pesar de la mejoría, el mercado de vivienda tendrá que crear estrategias para enfrentar grandes retos en el futuro, como una economía y mercado de empleo más pequeño y la reducción de la población, según el informe que presentó Graham Castillo, presidente de Estudios Técnicos, Inc. durante la convención de la Asociación de Banqueros Hipotecarios (MBA, por sus siglas en inglés).
“El mercado inmobiliario de Puerto Rico está mejorando, como lo reflejan las tendencias de precios y las ventas de viviendas. La falta de oferta de vivienda en ciertos mercados de la Isla incluso está impulsando aumentos de precios en dichos mercados. Es un mercado de nichos”, comentó Castillo. Advirtió, sin embargo, que la industria tiene que continuar adaptándose a los cambios esperados en las condiciones socioeconómicas y demográficas.
En un análisis de las ventas de casas entre el 2012 y el 2018, el informe mostró un marcado descenso en el 2017. La reducción en ventas en el 2017 estuvo relacionada con el huracán María, ya que, hasta ese momento, la tendencia en las ventas de viviendas superaba las del 2016. En el 2018 volvieron a aumentar a 10,789, sobre las 8,805 del 2017.
Entre el 2017 y el 2018, hubo un 78% de aumento en las ventas de unidades de viviendas de nueva construcción a precios más bajos. El precio promedio de venta en el 2017 fue de $175,071 y disminuyó un 8% en el 2018 a $161,503. En total se vendieron 1,433 casas nuevas en el 2018 vs. 807 en el 2017. Las regiones donde más viviendas nuevas se vendieron son Ponce, Mayagüez y San Juan.
En el caso de las reventas de unidades de vivienda, el aumento en ventas fue de 17%. El precio de venta promedio en este sector aumentó un 1%, de $128,546 en el 2017 a $130,164 en el 2018. Se vendieron en total 9,356 viviendas usadas en el 2018 vs 7,998 en el 2017. En cuanto a los precios, el 71% de las ventas en el 2018 fueron residencias con precios menores de $150,000.
La tendencia en ventas en el primer trimestre del 2019 (2,484 casas) supera al primer cuatrimestre del 2018 (2,304). El inventario actual de viviendas de nueva construcción, a marzo de 2019, incluye 151 proyectos residenciales nuevos, con un inventario de 1,446 unidades disponibles; esto es 10.9% menos del inventario en diciembre de 2018. El 70% de este inventario tiene un costo de $200,000 o menos.
Castillo explicó que los tres mayores retos de la industria de vivienda e hipotecaria en Puerto Rico son: una economía más pequeña, que desde el 2006 ha experimentado una contracción económica total de 19.1%; un mercado laboral reducido, que entre el 2007 al 2019 tuvo una pérdida neta de 158,000 empleos (63,700 en el sector privado y 95,200 en el gobierno); y finalmente una población decreciente (de 3.8 millones en el 2000 a 3.1 millones en el 2018) debido a la baja en nacimientos y la emigración. La proyección es que la población continúe disminuyendo hasta llegar a 3 millones en el 2022.
En el renglón positivo, una de las oportunidades para el mercado de la vivienda es que posterior al huracán María, el mercado laboral se ha comenzado a fortalecer y hay un moderado aumento en la cantidad de hogares con ingreso anual de más de $50,000. Hay otros indicadores de mejoría económica a partir de septiembre de 2017 que incluyen mayores recaudos del Departamento de Hacienda, aumento en las ventas de cemento, ventas de auto y empleo.
Los fondos federales para la reconstrucción de viviendas CDBG-DR ascienden inicialmente a $9,730 millones y representan una gran oportunidad para la industria, ya que el 49% de estos son para la construcción de nueva vivienda.