Por redacción de Sin Comillas

La economía de Estados Unidos cerró 2018 con su mayor crecimiento en los últimos tres años. El producto interior bruto (PIB) experimentó un crecimiento de 2.9%, siete décimas por encima del año anterior, impulsado por el gasto de los consumidores, la inversión fija no residencial y las exportaciones. La economía no crecía a este ritmo desde 2015.

En el cuarto trimestre, el PIB creció 2.6% lo que representa una caída respecto los trimestres precios cuando el crecimiento fue de 3.4% y 4.2%.

El gasto de los consumidores registró un avance de 2.8%, siete décimas menos que en el tercer trimestre de 2018. La inversión doméstica privada creció 4.6%, frente al 15.2% en el trimestre anterior. El gasto y la inversión del Gobierno cayó a su nivel más bajo desde el tercer trimestre de 2017 al crecer 0.4%.

Las exportaciones netas crecieron 1.6%, frente al 4.9% en el trimestre anterior, mientras que las importaciones avanzaron 2.7%. Los ingresos personales disponibles aumentaron 5.7%. La tasa de ahorro personal se situó en 6.7%, frente al 6.4% del tercer trimestre de 2018.

El Departamento de Comercio debería haber publicado este jueves la segunda estimación del crecimiento del PIB pero, debido al cierre parcial del Gobierno federal durante más de un mes, no se publicó la primera estimación del crecimiento de la economía, que estaba prevista para enero. Por eso, decidió condensar las dos primeras estimaciones en una sola.