Cada aumento de 10% en la penetración de banda ancha genera un alza de 1% en el Producto Interno Bruto (PIB). Por cada 10% de aumento en el número de celulares el PIB crece 0.5%. Por cada 1,000 usuarios nuevos de banda ancha se crean 80 empleos. Estos datos sirven de argumento para promover la desregulación del sector, que en Puerto Rico está a cargo de la Junta Reglamentadora de Telecomunicaciones (JRT).
Es lo que propuso José j. Villamil, presidente de la junta de directores de la firma Estudios Técnicos, Inc. durante su participación en el Puerto Rico Telecom Conference que organizó la Cámara de Comercio la semana pasada. Los problemas que ha tenido Claro para lograr la aprobación de su servicio de televisión sobre protocolo de Internet son ejemplo de que se necesita una política pública nueva que perciba a las telecomunicaciones como un sector que hay que promover y no sólo regular, comentó Villamil, quien puso como ejemplo a Singapur, donde la contraparte de la JRT se llama “Media Development Authority” y donde es posible obtener una licencia en sólo cinco días.
Por su parte, Per Fredriksson, de Ericsson de Costa Rica, ofreció cifras dan vértigo. En la actualidad hay 2,000 millones de usuarios de Internet, 5,000 millones de teléfonos celulares, 200,000 mensajes de textos cada segundo, 1,400 millones de usuarios de medios sociales, 20,000 millones de aplicaciones.
Fredriksson señaló que el desarrollo de las comunicaciones de banda ancha y la reducción de los costos de conexión van a permitir que en el 2025 haya 50,000 millones de aparatos conectados a Internet.
Para compañías como Microsoft, los retos están en el volumen de datos que habrá que manejar y en las soluciones que hay que desarrollar, dijo Cleber Voelzke, gerente general de Microsoft Puerto Rico.
