Por redacción de Sin Comillas
Un sondeo entre los socios de Asociación de Compañías de Seguros (Acodese) sobre el progreso de la adjudicación de estas reclamaciones revela que, al 31 de enero de 2018 se han recibido 170,681 reclamaciones como resultado del impacto de los huracanes. De éstas se han pagado ya un 44%, unas 75,493 reclamaciones.
Alrededor de 26,671 reclamaciones fueron cerradas sin pago, lo cual representa aproximadamente el 15% de las reclamaciones presentadas. Los datos los ofreció Acodese durante una vista pública de la Comisión de Asuntos del Consumidor, Banca y Seguros de la Cámara de Representantes que investiga la alegada tardanza en el manejo del ajuste y pago de reclamaciones por las aseguradoras por concepto de daños tras el paso de los huracanes Irma y María por la Isla.
Las reclamaciones adjudicadas ascendieron a un pago total de $991,857,997, cifra que ya ha sido desembolsada para compensar a los asegurados por los daños resultantes del desastre. De esta cantidad, $362,560,063 se ha pagado por concepto de adelantos, mientras se concluye la adjudicación de toda la reclamación. En la vista se explicó que estos adelantos se han realizado en aras de agilizar el trámite y contribuir a la más pronta recuperación de los asegurados.
La mayoría de los aseguradores recibieron en un periodo de tres meses la misma cantidad de reclamaciones que reciben en un año. Para hacer frente a la ola de reclamaciones, las aseguradoras explicaron que han tomado medidas para responder con la mayor celeridad, tales como extender los días y las horas de trabajo del personal a cargo de la adjudicación y pago de los casos, y el reclutamiento de nuevo personal, incluyendo ajustadores de emergencia.
Ante la crítica de que no estuvieran preparadas, las compañías señalaron que “no hay manera de prepararse para este evento por la magnitud y volumen de reclamaciones recibidas. Si bien todos los aseguradores cuentan con planes de contingencia, que son actualizados periódicamente, no se puede razonablemente esperar que estos cuenten con un 20% de exceso de empleados, sentados por 20 años esperando a que pueda llegar un desastre comparable con el Huracán María”.
Por otro lado, el comisionado de Seguros, Javier Rivera Ríos, informó que hasta el 31 de enero del presente año, su oficina recibió 236 querellas por parte de asegurados. La mayoría de los casos debido a la denegación de reclamaciones, la inconformidad con la oferta de pago, la falta de cubierta, el incumplimiento de cartas normativas y el retraso en la reclamación.
Tras el huracán Georges, las reclamaciones a los aseguradores resultaron en el pago de $1,200 millones en pérdidas. El proceso de adjudicación y pago de esas reclamaciones tomó dos años. Con el Huracán María, se han pagado más de $1,000 millones al 31 de diciembre de 2017, es decir en un periodo de tres meses.
Luego del Huracán Katrina, los aseguradores en Estados Unidos pagaron el 99% de las reclamaciones de líneas personales luego de dos años. “Esto denota el largo proceso que requiere resolver reclamaciones luego de un desastre natural de esta magnitud y, a pesar de ello, nuestros socios han resuelto el 59.8% de las reclamaciones recibidas a solo cuatro meses del paso del Huracán María”, dijo Acodese.
