Por redacción de Sin Comillas

La delegación demócrata del Senado se prepara para radicar hoy dos medidas que ayudarían a reestructurar la deuda pública de Puerto Rico, según publica The New York Times. Las medidas le darían prioridad a los pensionados sobre los bonistas y el Gobierno de Puerto Rico tendría la potestad de reestructurar toda su deuda, incluyendo las Obligaciones Generales. Además, las medidas propondrán un trato más justo en la distribución de beneficios de los programas federales y que los puertorriqueños puedan reclamar el crédito contributivo por ingreso de trabajo.

El senador Robert Menéndez, demócrata por New Jersey, es uno de los proponentes de la medida, que le daría al Gobernador el poder de establecer el orden en que se paga a los diferentes deudores. Un juez de quiebra, nombrado por el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito, aprobará el plan de reestructuración o pedirá cambios para cumplir con ciertos criterios. Los acreedores no podrán presentar propuestas alternas.

Se propone el nombramiento de un “chief financial officer” para Puerto Rico, nombrado por el Gobernador y la creación de una “junta de reforma y estabilidad fiscal”, que necesitará la aprobación de la Legislatura de Puerto Rico. Esta junta estará compuesta por nueve personas. Seis tendrán que ser residentes de Puerto Rico, cuatro sería nombrados por la Legislatura, dos por el Gobernador y uno por el Tribunal Supremo de Puerto Rico. La junta tendrá que certificar que los presupuestos cumplen con el plan fiscal a cinco años.