Por Luisa García Pelatti
La morosidad de los préstamos concedidos por los bancos se redujo en el cuarto trimestre hasta 8.7%, la más baja desde el 2008, según los datos del Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC). La tasa de morosidad estaba en dos dígitos entre los años 2009 y 2012.
En el 2006, antes de la crisis, la morosidad apenas alcanzaba el 2%. Entre 2010 y 2011 llegó a superar el 13%. A partir del 2013, la tasa cae por debajo del 10%.
El valor total de créditos dudosos se redujo hasta $1,955 millones, $70.1 millones menos que en el trimestre previo. El valor de los préstamos atrasados llegó a alcanzar los $7,700 millones a finales del 2010.
Los mayores problemas siguen estando en las carteras de préstamos de construcción y desarrollo, donde tres de cada 10 préstamos están atrasados. Los préstamos de los desarrolladores con atrasos aumentó ligeramente en el cuarto trimestre hasta $30.3 millones. En el 2009 esta cifra ascendía a $2,834 millones.
La morosidad en hipotecas sigue cayendo y se sitúa en 11.00%, su nivel más bajo desde del 2008. La morosidad en las tarjetas de crédito, una de las más baja, es de 1.62%.
Por institución financiera, la tasa de morosidad más alta es la de Scotiabank, 22.4%, ligeramente por encima de la cifra del trimestre anterior. En hipotecas, Scotiabank tiene una tasa de morosidad de 25.3% y la morosidad en préstamos de construcción y desarrollo (67.9%) es la más alta.
Santander tiene la morosidad más baja, 5.0%, pero está entre las más altas de los últimos cuatro años.