Oriental Financial Services quiere estar donde está la acción. Y en este caso la acción está en la Milla de Oro, el centro financiero del país. Allí, en el corazón de Hato Rey, Oriental ha invertido $450,000 en su segunda oficina de servicios financieros –ya tenía una en San Patricio. Habían organizado una ceremonia de inauguración para esta semana, pero el paso del huracán Irene literalmente les aguó la fiesta.
La quinta firma de inversiones –maneja $1,800 millones de activos de clientes– llega a Hato Rey con ganas de crecer: quiere aumentar su cuota de mercado, que ahora ronda el 5%; contratar más brokers y captar clientes adicionales. Los planes de expansión incluyen la apertura de varias oficinas adicionales, aunque no quieren dar detalles por ahora.
La nueva oficina está localizada en el Edificio 270 en la Avenida Muñoz Rivera, donde también hay una sucursal de Oriental en el primer piso. Allí trabajan siete corredores y asesores financieros.
“La localización de este nuevo centro de la casa de corretaje en el corazón de la Milla de Oro en Hato Rey ofrece mayor accesibilidad para nuestros clientes, muchos de los cuales trabajan en el área o mantienen vínculos estrechos con el centro financiero de nuestro país”, dijo José Rafael Fernández, presidente, principal oficial ejecutivo y vicepresidente de la Junta de Directores de Oriental, que indicó que Oriental fue pionero al establecer en 1993 la primera casa de corretaje dentro de un banco en Puerto Rico.
Alejandro Pascual, gerente del centro de Hato Rey, explicó a SIN COMILLAS que en las oficinas “se ofrecerá la gama completa de inversiones. Es un proceso completo de análisis para ayudar a los clientes a alcanzar sus objetivos”. La oferta de servicios va desde fideicomisos a planes de retiro Keogh y cuentas de retiro individual (IRA).
Según explica Sean Milles, vicepresidente senior y director de la división de Wealth Management de Oriental tuvo un año récord en crecimiento de capital y ganancias. Y este año los resultados están 36% por encima de los del año pasado.
“Queremos ser un ‘one stop shop’, donde puedan venir los clientes y tener acceso a toda la gama de servicios financieros”, señala Milles, con 20 años de experiencia en el sector. “Mantener ese enfoque nos va a llevar al crecimiento”, dice el ejecutivo, que aclara que no buscan ser, necesariamente, la compañía de inversiones más grande, sino la que ofrece “el mejor servicio”. “Y con eso viene lo otro”.
Hasta el segundo trimestre del año pasado, Oriental ocupaba el segundo lugar entre las compañías de inversiones. En el tercer trimestre perdió esa posición a manos de Merrill Lynch, que habría crecido impulsado por las adquisiciones de compañías más pequeñas.
“Nuestra estrategia de crecimiento es más orgánica. No es tanto de adquisiciones, pero no descartamos una compra si se presentara una oportunidad”, apunta Milles.
Oriental (NYSE: OFG) es una compañía tenedora de acciones diversificadas que opera bajo las leyes y regulaciones bancarias de los Estados Unidos y Puerto Rico. Con sobre $11,000 millones en activos, opera cuatro subsidiarias: Oriental Bank & Trust, el banco comercial que tiene la mayoría de sus acciones; Oriental Financial Services Corp., una casa de corretaje de valores; Oriental Insurance, Inc.; y Caribbean Pension Consultants, Inc., que administra planes de pensiones en Estados Unidos, Puerto Rico y las Bahamas. Ofrece una amplia gama de servicios bancarios a través de 30 sucursales, además de manejo de activos, servicios de fideicomiso, seguros, corretaje de valores y banca de inversiones.