Por Luisa García Pelatti
El 4 de febrero de 2014, Standard & Poor’s (S&P) degradó la deuda de las Obligaciones Generales de Gobierno a nivel especulativo o chatarra (BB+). Triste aniversario. Un año después, la economía se ha hundido más en la chatarra.
La agencia explicaba en aquel momento que la degradación se debía a las dificultades del Gobierno para darle liquidez al BGF y las restricciones para obtener financiamiento. Doce meses después las cosas han cambiado, pero para peor. Tres días después, Moody’s Investors Service (Moody’s) degradó al deuda dos niveles, y el 11 de febrero era el turno de Fitch Ratings.
En marzo, el Banco Gubernamental de Fomento (BGF) colocó $3,500 millones en bonos de Obligaciones Generales (GOs, por sus siglas en inglés) exentos. Fue la mayor transacción para unos bonos con clasificación de chatarra en la historia del mercado de bonos.
A finales de junio, se probó la ley para reestructurar las deudas de corporaciones públicas, y eso desembocó en lo que algunos llamaron el “martes negro” (el 1 de julio). Moody’s degradó todo lo degradable. La deuda, que ya estaba a nivel de chatarra, baja tres niveles, de Ba2 a B2. La deuda pasa de “calidad de crédito cuestionable” a “alto riesgo crediticio”. El 9 de julio vino la degradación de Fitch y dos días después actuó S&P.
Ahora, la situación se anticipa muy complicada. El BGF tiene problemas de liquidez y dificultades para sacar al mercado una emisión que sería su tabla de salvación. Y después de que salgamos del caldeado debate que va a generar la radicación del proyecto de reforma contributiva en las próximas semanas, nos daremos de bruces con el mes de marzo, cuando se espera que se utilice (por fin, para algo se creó) la ley para reestructurar las deudas de corporaciones públicas. Por que ¿alguien tiene dudas de que esta ley se hizo para que la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) pudiera acogerse a la quiebra?
Las agencias clasificadoras de deuda han estado relativamente tranquilas desde el verano del año pasado, pero ¿seguirán así si la AEE reestructura su deuda? Nos espera meses intensos antes del verano.