Por Luisa García Pelatti
El discurso del presidente de la Reserva Federal de Nueva York, William C. Dudley, decepcionó a los que esperaban que dijera algo novedoso o noticioso sobre la economía de Puerto Rico.
En su última visita a la Isla, en el 2011, el Fed veía “señales prometedoras” en la economía de Puerto Rico. En el 2012, decía que la recuperación se había estancado. Hace un mes, veía una mejora en la economía de Nueva York. Esta vez dijo que se “empiezan a ver algunos signos de mejora en la actividad económica”, aunque hay poca evidencia de que esté produciendo la fuerte recuperación que esperan.
La Reserva Federal de Nueva York está actualizando el estudio sobre la economía de Puerto Rico que hicieron en el 2012. El nuevo estudio se enfocará en la salud fiscal de la economía, en los factores que han provocado el aumento de la deuda y las tendencias de cara al futuro. El reto será lograr que la economía crezca al mismo tiempo que se limita el crecimiento de la deuda.
“Déficits fiscales persistentes, así como el aumento del déficit en el funcionamiento de las diversas corporaciones públicas han elevado sustancialmente el nivel de la deuda pública y plantean serias preocupaciones sobre si la situación fiscal de la Isla es sostenible”, dijo Dudley, que presentó una propuesta de seis puntos, cuyo contenido seguro que les es familiar:
- Promover el crecimiento económico mediante la reducción de las barreras para crear empleo y promover la participación laboral; facilitar la creación de empresas y el establecimiento de enlaces entre la universidad y las empresas;
- Reforma contributiva;
- Mejorar los informes financieros del gobierno;
- Fortalecer las corporaciones públicas;
- Adoptar las normas para balancear presupuestos de Estados Unidos;
- Establecer presupuestos multianuales
Dudley hizo un retrato de una economía con un mercado laboral débil, con un crecimiento modesto en el sector privado que no logra compensar la pérdida de empleos en el gobierno. “La baja tasa de participación laboral y las altas tasas de desempleo siguen siendo quizás los mayores retos de la economía de Puerto Rico”.