Por Luisa García Pelatti
La economía de Puerto Rico he perdido la capacidad de crecer y no se espera que aumente por encima del 1% en los próximos tres años. Pero la indecisión política podría empeorar las cosas.
“La legislatura le está poniendo difíciles las cosas al Gobierno y eso va a tener un efecto en el comportamiento de la economía”, advirtió José J. Villamil, presidente de la Junta de Directores de Estudios Técnicos, Inc., que junto a Bernhard Koepp, senior managing director de International Strategy & Investment, ofrecieron una conferencia a clientes de Oriental la semana pasada.
Mientras Koepp comentó que la economía de Estados Unidos empieza a recuperarse y podría crecer 3% en la segunda mitad del año; la economía de Puerto Rico se mueve en la dirección contraria.
Tras seis años de contracción, Villamil dice que no se puede hablar de recesión. “Esto es un problema estructural. La economía de Puerto Rico ha perdido su capacidad de crecer”. La base productiva se ha perdido y en los últimos seis o siete años se ha perdido el 40% de los empleos.
Y para dramatizar la situación en la que estamos da un ejemplo: no llegaremos a donde estaba la economía en el 2006 hasta el 2020 y sólo si crecemos a un ritmo anual de 1.75%.
Hace una semanas, el Gobierno presentó su plan para salvar el Sistema de Retiro, que tiene un elevado déficit. Varios legisladores han presentado sus propios planes alternos. Villamil opina que, al presentar sus propias medidas, la Legislatura crea confusión, “mucho ruido”. “La política fiscal tiene que manejarla el Ejecutivo, porque tiene el personal, los recursos y el compromiso”.
Las proyecciones económicas apuntan a una economía que no va a ser muy diferente a la que tenemos ahora. Si crecemos 1% o menos no habrá diferencia, dice Villamil.
Y mientras, la población se reduce, envejece y se hace más pobre. “Puerto Rico se tiene que preparar para eso y lo tiene que hacer urgentemente”.
Villamil explica que estos cambios demográficos representan retos, pero también oportunidades de negocios en áreas como educación, finanzas y salud.
El experto se refirió también al problema del alto costo de la gasolina y la energía eléctrica. “No seremos capaces de resolver esos problemas durante un buen tiempo. Puerto Rico tiene que asumir que el costo de la energía seguirá siendo un obstáculo durante un buen número de años”.