Por redacción de Sin Comillas
Grupo Santander ha cerrado septiembre de 2012 con un beneficio atribuido de 1,804 millones de euros, lo que supone un descenso del 66% con respecto a los nueve primeros meses de 2011. El beneficio ordinario obtenido de enero a septiembre asciende 4,250 millones de euros, al que se suman 1,029 millones de plusvalías obtenidos, principalmente con la venta de la unidad de Colombia y con el reaseguro de la cartera de seguros de vida de España y Portugal. Por tanto, el beneficio del período habría sido de 5,279 millones de euros, pero tras destinar 3,475 millones netos a provisiones para la cobertura de los riesgos con el sector inmobiliario en España, queda reducido a los mencionados 1,804 millones.
El Presidente de Banco Santander, Emilio Botín, ha señalado que “la capacidad de generación de resultados de Banco Santander nos permite hacer un fuerte saneamiento inmobiliario en España en 2012 y aumentar notablemente la cobertura de morosos. En nueve meses hemos generado un beneficio antes de provisiones de 18,184 millones”.
En los tres primeros trimestres de 2012, los ingresos básicos y gastos de Santander aumentaron a ritmos del 5%, lo que colocó el margen neto (beneficio antes de provisiones) en 18,184 millones de euros, con un incremento del 3%. La combinación de ingresos y costes tiene como consecuencia que la ratio de eficiencia se sitúa en el 45.4%, tres décimas mejor que el cierre de 2011.
La diversificación de Banco Santander sigue siendo clave para entender la resistencia de los resultados del Grupo en un entorno tan complejo en Europa, donde desarrolla una parte muy importante de su actividad. Latinoamérica aporta el 50% del beneficio —Brasil suma el 26%; México, el 13%, y Chile, el 5%—; Europa continental añade el 28% —España agrega un 16%; Polonia, un 5%, y Alemania, un 4%—; Reino Unido, el 13%, y Estados Unidos, el 9%.
El crédito crece en las unidades que operan en mercados emergentes, Latinoamérica y Polonia, mientras que cae en las economías que están en fuertes procesos de desapalancamiento, como España y Portugal. En cambio, en estos últimos países están creciendo más los depósitos.
La tasa de morosidad del Grupo se sitúa en el 4.33%, lo que supone un aumento de 0.47 puntos con respecto a un año antes y 0,22 en el trimestre. En España, la morosidad se sitúa en un 6.38%, con un aumento de 0,89 puntos en el año, afectada por la caída del crédito. En Reino Unido, la mora está prácticamente estable, sube una décima en el año hasta 1.94%. En Santander Consumer Finance, está en el 3.96%, prácticamente igual que en diciembre de 2011. En Estados Unidos continúa en niveles muy bajos, con el 2.31%. En Latinoamérica, la mora sube en Brasil y en Chile alrededor de un punto y baja en México.
En todos los mercados la tasa de mora está por debajo de la media del sector, especialmente en España, donde el conjunto de entidades presenta una morosidad de más de cuatro puntos superior al negocio del Grupo Santander en el país.
Durante los nueve primeros meses de 2012, Banco Santander ha reducido su exposición al riesgo inmobiliario y, a la vez, ha incrementado notablemente las provisiones para cubrir las potenciales pérdidas en esta actividad en España.
A finales de septiembre se produjo la colocación del 24.9% de la filial de México. La operación ha sido un éxito dado que la demanda de acciones superó en casi cinco veces a la oferta. El importe de la operación ha ascendido a 3,200 millones de euros, que han mejorado el ratio core capital del Grupo en medio punto porcentual.
Banco Santander terminó el tercer trimestre de 2012 con una capitalización de 57,363 millones de euros que le sitúan como primer banco de la zona euro por valor en Bolsa. Dicho importe está lejos del patrimonio neto de Banco Santander, que se situaba en 84,362 millones a cierre de septiembre.
En el Grupo Santander trabajan 188,146 personas, que atienden a 102 millones de clientes en 14,496 oficinas. Estas cifras colocan a Santander como el mayor grupo financiero internacional tanto en número de accionistas como en red de oficinas.