Por Redacción de Sin Comillas

En Puerto Rico, la actividad de construcción, después de acelerarse en la segunda mitad del 2024, ha disminuido en los dos primeros meses del año, según el Índice de Indicadores Coincidentes de la Construcción, que elabora el economista Ángel Rivera Montañez.

Los datos mensuales indican que el índice cayó 1.0% en enero y 0.7% en febrero, cuando se compara con el mes previo. El índice había crecido 1.4% en diciembre de 2024. El sector había acelerado su actividad durante la segunda mitad del año pasado, cuando se registraron cuatro alzas en seis meses. Esta aceleración es resultado del programa de reconstrucción, explica el analista.

Cuando se compara con el mismo mes del año pasado, el índice subió 2.4%, el crecimiento más bajo en cinco meses. El Índice creció 2.1% en los primeros ocho meses del año fiscal 2025 cuando se compara con el mismo periodo del año fiscal 2024, cuando la subida fue de 5.9%.

El Índice de Indicadores Coincidentes de la Construcción, terminó el año 2024 con un aumento de 1.3%, frente a una subida de 6.8% en el 2023.

«Las recientes medidas arancelarias en productos como el acero y los metales amenazan con provocar una nueva escalada de precios en los materiales de construcción y una desaceleración en la actividad del amplio programa de reconstrucción en obras de infraestructura, en particular las de utilidades, viviendas y sistemas viales. Esto, junto a declaraciones de recortes en el gasto público, son factores importantes en el desarrollo y planificación de obras en la industria», explica Rivera Montañez.

La industria continúa sintiendo los efectos negativos de las significativas alzas en los precios y salarios en la construcción a partir de la pandemia. Los precios son 36% más altos que en abril de 2020, en el pico de la pandemia. «Las expectativas de la industria se inclinan hacia una escalada de precios», opina el economista.

«La industria enfrenta serios retos. Las recientes imposiciones de aranceles amenazan con provocar alzas en los precios de los materiales básicos de construcción, que, junto a la posibilidad de una reducción en la asignación de fondos federales para la reconstrucción debido a las nuevas políticas fiscales de la administración federal, la industria puede perder impulso y estancarse dicho proceso», advierte.