Por Redacción de Sin Comillas
Este año la reunión anual para luchar contra el impacto del cambio climático, conocida como la COP29, se celebra en Bakú, la capital de Azerbaiyán, hasta el próximo viernes 22 de noviembre.
En la COP29, oficialmente la 29 Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), los países tratarán de establecer un nuevo objetivo anual de financiamiento para el clima que sustituya al compromiso de $100,000 millones establecido en 2009, que expira a finales de año y que, según muchos, es muy inferior a lo que se necesita para hacer frente al rápido aumento de las temperaturas del aire y del mar.
Con motivo de la inauguración de la COP29, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) publicó su actualización sobre el estado del clima en 2024, señalando que se perfila ya como el año más cálido de la historia registrada.
La OMM emitió una “alerta roja” sobre la rápida progresión del cambio climático en una sola generación, impulsado por el aumento de los niveles de gases de efecto invernadero en la atmósfera.
Los años 2015-2024 marcarán la década más calurosa jamás registrada, con una pérdida acelerada de hielo glaciar, un aumento del nivel del mar y el calentamiento de los océanos. Las condiciones meteorológicas extremas están causando importantes trastornos a comunidades y economías de todo el mundo.
De enero a septiembre de 2024, la temperatura media mundial del aire en superficie fue 1.54 °C superior a la media preindustrial, amplificada por el calentamiento de El Niño, según un análisis de seis conjuntos de datos internacionales utilizados por la OMM.
Ese fue el objetivo que se fijó en el acuerdo de París de 2015 para final de siglo para poder hacer frente a los efectos del cambio climático. Pero ya hemos alcanzado ese nivel.
El responsable de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, Simon Stiell, destacó la necesidad de fijar un nuevo objetivo de financiación para el clima es crucial para el bienestar de todas las naciones, incluidas las más ricas y poderosas.
Stiell dio duros ejemplos de por qué es tan crítico un nuevo acuerdo sobre financiamiento climático, diciendo que todos los países pagarán un precio terrible si al menos dos tercios de los países del mundo no pueden permitirse reducir rápidamente sus emisiones. Además, toda la economía mundial podría colapsarse si los países no son capaces de reforzar sus cadenas de suministro.
Stiell, secretario ejecutivo de la CMNUCC, es natural de Granada, el país caribeño donde la isla de Carriacou estuvo a punto de ser arrasada por el huracán Beryl el pasado mes de julio.
En los últimos días de la conferencia, se espera que los negociadores redacten el “texto final”, un acuerdo global que perfile el enfoque mundial para hacer frente al cambio climático.