Por Luisa García Pelatti

A pesar de la devastación provocada por Irma y María, dos huracanes de categoría 5 que en un solo mes impactaron la Isla en 2017, los efectos en los bancos de Puerto Rico fueron relativamente modestos y transitorios y no se produjo una disminución en la capacidad crediticia, según un análisis realizado por el Banco de la Reserva Federal de Nueva York.

“Estudiamos la experiencia de Puerto Rico después de la severa temporada de huracanes de 2017 para comprender mejor cómo los desastres climáticos extremos afectan la estabilidad bancaria y su capacidad para otorgar préstamos”, explica el Banco de la Reserva Federal de Nueva York.

El huracán María causó $90,000 millones en daños, según datos la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), la tercera cifra más alta en la historia de Estados Unidos. Cuando se añaden los daños ocasionados por el huracán Irma, los daños combinados superaron el Producto Interno Bruto de Puerto Rico, que en 2016 de alrededor de $104,000 millones.

A pesar de la devastación, el huracán “María tuvo un impacto modesto y de corto plazo en el desempeño de los bancos y ningún impacto negativo sobre los préstamos”, según el estudio.

Las pérdidas financieras de los bancos fueron “relativamente menores y transitorias”. “Encontramos mayores tasas de morosidad de los préstamos, pero el impacto fue modesto y de corta duración. El capital y los ingresos de los bancos no se vieron afectados significativamente, ni tampoco el crecimiento de los préstamos”.

¿Por qué el impacto en los bancos no fue mayor?

El estudio menciona varios factores que protegieron a los bancos se sufrir más pérdidas. La existencia de los seguros de viviendas (homeowner insurrance), los seguros contra inundaciones, los seguros hipotecarios y la ayuda de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) ayudaron a mitigar el impacto.

Los autores del estudio (Natalia Fischl-Lanzoni, Ivelisse Suárez, Peter Anagnostakos, Jason Bram, Benjamin Chan,  Hasan Latif, James M. Mahoney, Donald P. Morgan y Ladd Morgan) explicaron que los resultados son consistentes con otros estudios recientes sobre los efectos en los bancos del huracán Katrina e(2005) en Nueva Orleans o de otros huracanes en el Caribe.