José Rafael Fernández. (Foto suministrada)

Por Luisa García Pelatti

Los periodistas aprovecharon el jueves la conferencia de prensa sobre los resultados trimestrales de Oriental para preguntarle a su presidente, José Rafael Fernández, sobre temas de actualidad: el aumento en las tasas de interés, la inflación, la posibilidad de una recesión mundial y, como no, el tema del momento, el servicio eléctrico.

El banquero iba a hablar de lo suyo, los resultados del banco. Oriental presentó en el tercer trimestre los mejores resultados de su historia. Los periodistas, en cambio, buscaban otros titulares. Les resulta más noticioso lo que opina el presidente de un banco sobre la economía y otros temas de actualidad. En ese sentido, Fernández bromeaba pidiendo que publicaran dos artículos, porque no quería que sus declaraciones opacasen las buenas noticias de Oriental. Pero es inevitable. Los banqueros son pocos. Casi una especie en peligro de extinción. Y cuentan con buena información.

El presidente de Oriental explica que la subida de la inflación y de la tasas de interés están provocando una caída de los depósitos (debido al aumento del gastos de los consumidores) y las empresas hacen menos uso de las líneas de crédito (es más caro usarlas). Pero anticipa que esta tendencia se va a ir normalizando en los primeros meses del año que viene.

La subida de las tasas de interés afectará principalmente a las hipotecas, explica, y aclara que si bien es cierto que las tasas están subiendo siguen siendo más bajas de lo que han sido históricamente. Fernández confía en que en los próximos dos o tres trimestres las tasas de interés se estabilicen. Anticipa que la Reserva Federal subirá las tasas 75 puntos base en noviembre, 50 puntos en diciembre y después habrá una pausa para ver cómo responde la economía.

La economía mundial podría entrar en un proceso de recesión con un nivel de inflación alto. El presidente de Oriental explica que esta vez Puerto Rico enfrente este entorno incierto con una ventaja, “cuenta con un colchón”. “En Puerto Rico deberían estar llegando una cantidad importante de fondo federales para la renovación de la infraestructura y eso debe servir de colchón”.

Apunta que lo más importante es “resolver los impases con la reconstrucción de la infraestructura”. Opina que hay un problema de ejecución, de habilidad para liderar un proceso de ejecución. Sobre el proceso de reestructuración de la deuda de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) Fernández comentó que “es frustrante que no hemos podido llegar a una negociación y a un acuerdo. Pero para mi el riesgo más grande es que si no acabamos de resolver nuestros problemas con la infraestructura energética y no acabamos de entender que tenemos que tener unsistema energéticos diversificado, resiliente, de bajo costo y bien gobernado, Puerto Rico está yendo al juego con las manos atadas. Los residentes están viviendo con una incertidumbre que no es razonable”.

“Podemos culpar todo lo que queramos. Los que están manejando esto en el presente están heredando grandes retos de infraestructura. La respuesta aquí es que hay que empezar a buscar soluciones y dejar de estar entrando en disputas que no añaden ningún valor. Tenemos que empezar a trabajar y cumplir con los requisitos y nos podemos seguir peleando porque los requisitos son complicados. Estamos en la pelea chiquita y en ese proceso los que salimos trasquilados somos los ciudadanos”.