La agencia de calificación de deuda, Standar & Poor’s, ha rebajado la perspectiva de Estados Unidos hasta “negativa”, aunque ha mantenido su nota en la máxima calificación posible, “AAA”. La agencia advierte que si EEUU no logra poner orden en el presupuesto se enfrenta a un recorte del ráting en los próximos dos años.

La bolsa de Nueva York se vio afectada por la decisión de  S&P, aunque al final de la sesión Wall Street logró moderar las caídas.  Al cierre de la sesión el Dow Jones se dejó un 1.14%, hasta 12,202 puntos, mientras que el S&P 500 recortó un 1.1%, hasta 1,305 putos. El Nasdaq Composite cayó un 1.06%, hasta 2,735 puntos.

Standar & Poor’s cree que “más de dos años después del inicio de la crisis financiera, los partidos políticos todavía no han detallado como pondrán fin al deterioro de su déficit y a las presiones fiscales a largo plazo”.

Según S&P, la rebaja de la perspectiva se debe “al aumento del riesgo en las negociaciones respecto a la deuda estadunidense”. S&P considera que hay un “riesgo material de que el funcionariado de política de Estados Unidos no alcance un acuerdo” para aumentar el techo de la deuda.

“La economía de EEUU es flexible y muy diversificada, la efectiva política monetaria del país ha apoyado el crecimiento del Producto Interior Bruto a pesar de contener las presiones inflacionistas”, señala la agencia. No obstante, S&P considera que el creciente endeudamiento del país en relación al resto de emisores soberanos con la máxima calificación crediticia y el riesgo de que los legisladores no alcancen un acuerdo sobre cómo hacer frente a los desequilibrios de deuda antes de 2013 suponen una amenaza.

En su nota S&P destaca que la máxima calificación de la deuda de EEUU descansa sobre una economía muy flexible y diversificada y está respaldada por un historial de política monetaria prudente y creíble. Asimismo, el ‘rating’ de EEUU también refleja las ventajas únicas proporcionadas por la condición del dólar de divisa de referencia mundial.

Nikola G. Swann, analista de S&P considera que EEUU “quizás no puedan contrarrestar plenamente” los riesgos crediticios de los dos próximos años para un nivel ‘AAA’. La agencia explica que la perspectiva “negativa” del ‘rating’ de EEUU supone que existe “al menos una probabilidad entre tres” de que pueda rebajarse la nota de EEUU en los dos próximos años.

Mary Miller, asistente del secretario del Tesoro, ha asegurado que EEUU está dispuesto a tomar las medidas necesarias para reducir su déficit presupuestario y que ambos partidos políticos están de acuerdo en que ahora es el momento de actuar.

“Creemos que la perspectiva negativa de S&P subestima la capacidad de los líderes de Estados Unidos de unirse para hacer frente a los difíciles retos fiscales a los que enfrenta el país “, ha señalado Miller.