Por redacción de Sin Comillas
El Tribunal de Apelación de París confirmó la condena del grupo bancario suizo UBS por prácticas ilegales y blanqueo y le impuso sanciones multimillonarias, pero inferiores a las que otro tribunal dictó en primera instancia en 2019.
Los jueces consideran demostrado que la filial francesa del grupo suizo creó un dispositivo de evasión fiscal que privó a las arcas públicas de miles de millones de euros de impuestos entre 2004 y 2012. UBS aconsejaba a personas adineradas que abrieran cuentas en Suiza y así pagar menos impuestos.
Los jueces decidieron la confiscación de 1,000 millones de euros (unos $1,140 millones) que la entidad financiera tenía depositados como fianza y UBS tendrá que pagar además al Estado francés 800 millones de euros en concepto de daños y perjuicios, así como una multa de 3.75 millones de euros.
Son cifras que están por debajo de las que había decidido el Tribunal de Gran Instancia de París en febrero de 2019, que le había sentenciado entonces a una multa de 3,700 millones de euros y a indemnizar al Estado con 800 millones de euros.