Por Luisa García Pelatti
En el mes de junio se ejecutaron 686 hipotecas, según datos de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF). Es la cifra más alta desde 2016.
Las ejecuciones de hipotecas, que disminuyeron drásticamente con la llegada de la pandemia y la entrada en vigor de moratorias en el pago de hipotecas, empezaron a crecer en enero, pero entre mayo y junio la cifra se ha triplicado.
El año 2020 cerró con 911 viviendas ejecutadas, un 77.9% menos que el año anterior. La cifra supone un promedio de 76 viviendas ejecutadas al mes. En el 2019, se habían ejecutado 4,117 viviendas, un promedio mensual de 343 viviendas.
Por otro lado, en junio había 9,812 hipotecas en proceso de ejecución, 20.6% menos que en el mismo mes del año pasado. Las viviendas en proceso de ejecución empezaron a caer en marzo del año pasado, al inicio de la pandemia y desde entonces han seguido disminuyendo.
En junio, existían 6,074 hipotecas en proceso de quiebra, 352 menos que en junio del año pasado, una caída de 5.5%, la octava caída consecutiva.