Por Luisa García Pelatti

Las reclamaciones iniciales al programa tradicional de seguro de desempleo cayeron hasta 1,950 la semana que terminó el 15 de mayo, un 34.3% menos cuando se compara la semana anterior, según datos del Departamento del Trabajo de Estados Unidos. Es el nivel más bajo en las últimas seis semanas.

Las reclamaciones iniciales miden el número de casos nuevos radicados en la semana para beneficios bajo el programa del Seguro por Desempleo del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos.

Por otro lado, el número total de reclamaciones semanales al seguro por desempleo (un indicador del desempleo total) fue de 34,967 en la semana que terminó el 8 de mayo (esta dato se informa con una semana de retraso), un descenso de 7.4% respecto a la semana anterior.

El número de personas que reciben beneficios de los programas relacionados con la pandemia también han disminuido, tras dispararse la última semana de abril. Las reclamaciones de la “Compensación por Desempleo de Emergencia Pandémica” (PEUC, por sus siglas en inglés) bajaron de 123,238 a 50,235. El PEUC provee hasta 13 semanas adicionales de beneficios para individuos que han agotado todos sus derechos bajo el Seguro por Desempleo.

Las reclamaciones de la “Compensación Federal por Desempleo Pandémico” (PUA, por sus siglas en inglés), dirigida a los trabajadores que no están cubiertos por el programa tradicional de beneficios de desempleo, se quedaron prácticamente igual a la semana anterior, en 214,974.

En Estados Unidos, el número de reclamaciones iniciales de desempleo disminuyó a 444,000 la semana que terminó el 15 de mayo, 34,000 menos que la semana anterior. Este es el nivel más bajo desde mediados de marzo. En total, el número de trabajadores que hasta ahora ha solicitado beneficios de desempleo subió a 3.8 millones, 111,000 más que la semana anterior.

En Estados Unidos hay 16 millones de personas que reciben beneficios por desempleo y de programas relacionados con la pandemia del estado o del gobierno federal. La semana pasada Texas, Oklahoma e Indiana se han unido a otros 21 estados que están eliminando el acceso a los beneficios de desempleo porque consideran que esos pagos desalienten a los que los reciben a buscar trabajo.

En Puerto Rico, el Gobierno ha descartado que vaya a tomar esa medida. En la Isla, hay unas 300,000 personas recibiendo beneficios por desempleo: 34,967 del programa de desempleo tradicional, 219,979 de PUA y 50,235 de PEUC.