Por redacción de Sin Comillas

La mayor red de oleoductos de Estados Unidos está paralizada desde que el viernes un grupo de piratas informáticos rusos robaron cerca de 100 gigabytes de información de sus sistemas online.

Un grupo de piratas informáticos (“hackers”) rusos agrupados bajo el nombre Dark Side ha dejado a Estados Unidos sin el 31% del combustible para automóviles y aviones. Los “hackers” entrando en los sistemas informáticos de la empresa Colonial, que controla la red de cuatro grandes tuberías por las que circula más de la mitad del carburante que abastece a la costa este del país. Hasta que Colonial no les pague un rescate millonario no entregarán los datos.

Las cuatro grandes tuberías de la red de Colonial, y que van desde Texas hasta Nueva York, están cerradas. Colonial tardará días en restablecer el suministro.

Colonial pertenece la mayor petrolera privada del mundo, la angloholandesa Shell, el private equity KKR y el holding Koch Industries.