Por redacción de Sin Comillas
La presidenta de la Asociación de Restaurantes (ASORE), Marisol Vega Couto, solicitó a la gobernadora la firma del Proyecto de la Cámara 2468 que permitirá a beneficiarios del Programa de Asistencia Nutricional (PAN) realizar compras de alimentos preparados en restaurantes durante la emergencia del COVID-19 en la isla.
“Permitir a los beneficiarios de la tarjeta del PAN adquirir alimentos preparados es un asunto de justicia social que atiende una necesidad real. El Proyecto de Ley, pendiente de la firma de la gobernadora, dispone que este beneficio sería por un tiempo limitado, mientras dure la emergencia del COVID-19 en la isla. De manera que, por el tiempo que la gobernadora determine, los usuarios de la tarjeta del PAN tendrán una opción adicional para adquirir sus alimentos. Esto es positivo porque permitirá un alivio en el flujo de personas que a diario entra a los supermercados y, en consecuencia, ayuda a la prevención de contagios, sobre todo de la población de alto riesgo. Más aún, es un apoyo importante para que aquellos que no tienen dónde confeccionar sus alimentos durante esta emergencia puedan alimentarse adecuadamente”, sostuvo la presidenta de la organización.
Por su parte, José Salvatella, pasado presidente de ASORE, negó las alegaciones de otros sectores que han indicado que la medida podría poner en riesgo fondos federales. Además, explicó que la legislación federal vigente permite a los estados que así lo soliciten establecer “Meals Programs” para que los beneficiarios puedan adquirir alimentos preparados.
“El más reciente proyecto de ayudas en el Congreso de los Estados Unidos, el H.R.6800, conocido como el HEROES Act, en la sección 60607, ordena al Departamento de Agricultura federal a permitir la adquisición de alimentos preparados mientras dure la situación de emergencia por el Covid-19. Esto no pone en riesgo un solo centavo”, afirmó Salvatella.
Añadió que aceptar la tarjeta del PAN en restaurantes se ha implementado en el pasado bajo el programa Piloto “Buen Provecho”. “Este programa permitió por un tiempo, que algunos beneficiarios del PAN pudieran adquirir sus alimentos en restaurantes. El programa funcionó perfectamente, sin señalamientos de ningún tipo, incluyendo los fondos federales”.
Se estima que los supermercados reciben unos $2,000 millones anuales producto de transacciones realizadas con la tarjeta del PAN. De otra parte, en emergencias anteriores, como el paso del huracán María por Puerto Rico, se ha concedido el uso de la Tarjeta de la Familia, solo en cafeterías ubicadas dentro de los supermercados. Sin embargo, en Estados Unidos, en restaurantes autorizados por el Servicio de Alimentos y Nutrición Federal (FNS, por sus siglas en inglés) se concede esta oportunidad a los beneficiarios del programa. Actualmente, algunos estados han implementado ayudas adicionales a los beneficiarios del programa, que incluyen la utilización de los fondos en restaurantes.
Cabe destacar que desde que comenzó la emergencia por el COVID-19 en la isla, los restaurantes han permanecido abiertos ofreciendo sus servicios mediante delivery y carry-out. Esto ha permitido a los operadores de restaurantes reforzar sus ya severas medidas de seguridad e higiene, llevando una operación muy segura. Mientras tanto, los restaurantes se preparan con medidas adicionales para la reapertura de sus salones comedores, que comienza a partir de hoy.
En cuanto a denuncias relacionadas con el aspecto nutricional, Vega Couto manifestó que “con el paso del tiempo, los restaurantes han podido ajustar sus ofertas y menús, por lo que este argumento, que viene directamente de quienes representan a los supermercados en Puerto Rico, carece de fundamento. La realidad es que hoy día las personas pueden adquirir en los restaurantes, incluyendo los de comida rápida, los mismos alimentos que compran en supermercados ya cocinados y a precios asequibles. El mercado ha cambiado, la legislación ha cambiado y nuestra industria ha realizado los cambios pertinentes ajustados a la realidad de los tiempos”.
El proyecto cameral 2468 se encuentra en trámite para la firma de la gobernadora. El mismo incluye un paquete de medidas económicas para atender los efectos de la economía puertorriqueña provocados por la emergencia del Covid-19.