Agencias

Los precios de las acciones en las bolsas de valores de Nueva York cerraron el lunes con alza, en medio de una sesión tranquila tras su mejor semana del año. El índice industrial Dow Jones llegó a subir 37 puntos en la jornada, pero al final cerró con un avance de 6.51 puntos en 13,239.13. El Standard & Poor’s 500 ganó 5.58 puntos para acabar en 1,409.75 puntos, su máximo cierre desde el 20 de mayo de 2008. El índice compuesto Nasdaq, con predominio de las emisoras de alta tecnología, sumó 23.06 puntos a 3,078.32.

Ante la ausencia de noticias macroeconómicas importantes, los mercados avanzaron de la mano de las novedades de Apple, UPS y las empresas siderúrgicas estadounidenses, entre otras. Apple subió 2.7% a $601.10 por acción, su primer cierre por encima de los $600, tras anunciar que le pagará dividendos a sus accionistas y recomprará $10,000 millones de sus papeles en un lapso de tres años.

El pago de dividendos probablemente ampliará la base de accionistas, ya que los fondos mutuales seguramente los comprarán. Las acciones de Apple, que iniciaron el año en $405, subieron fuertemente en parte por la expectativa del pago de dividendos.

Por su parte, UPS subió 3.4% tras anunciar que comprará TNT Express, la segunda empresa de envíos de Europa detrás de DHL, afianzándose como la principal compañía mundial de paquetería del mundo.

Sprint Nextel se contrajo en 5% luego que un analista de Sanford C. Bernstein redujo su calificación de la empresa y vaticinó que las próximas versiones del iPhone no funcionarán bien con Sprint. El analista, Craig Moffett, también expresó su preocupación por las cuantiosas deudas de la empresa.

No hubo muchas noticias sobre la economía estadounidense. El índice de la Asociación Nacional de Constructores quedó sin variar con respecto al mes anterior.

En Europa, el índice CAC-40 de la Bolsa de París bajó 0.5% a 3,577 puntos, mientras que el índice alemán DAX estuvo casi sin cambios y concluyó el día en 7,154. El FTSE de Gran Bretaña retrocedió apenas 0.07% a 5,961.

Aunque la crisis de deuda de Grecia ha desaparecido de los titulares, Grecia permanece estancada en una tenaz recesión y cunde la incertidumbre. Los sindicatos de toda Europa están protestando contra los recortes de prestaciones, lo que pone en jaque a los gobiernos que tratan de reducir el gasto.

El mercado también se ve abofeteado por vaivenes políticos: el ministro de hacienda de Grecia renunció para ser director del partido socialista y Francia se dispone a celebrar elecciones presidenciales.

En una conferencia el domingo en Beijing, la directora del Fondo Monetario Internacional Christine Lagarde declaró que los líderes europeos deben mantenerse alertas ante las crecientes deudas.

“La economía mundial se ha salvado del precipicio y hay razones para ser un poco más optimistas”, declaró, “pero el optimismo no nos debe hacer complacientes y cómodos”.