Por redacción de Sin Comillas

Los bancos de Estados Unidos han superado la fase final de los test de estrés que cada año organiza la Reserva Federal, lo que implica que tienen vía libre para devolver dinero a los accionistas mediante dividendo o recompra de acciones. Es la primera vez que los 34 grandes bancos del país superan el examen. El año pasado, la filial de Santander en Estados Unidos y Deutsche Bank suspendieron la prueba.

Solo los 13 mayores bancos de Estados Unidos tienen que someterse al análisis de la fase final de los tests de estrés, que estudia el funcionamiento interno de las entidades y se fija en aspectos cualitativos.

Según la Reserva Federal, las compañías han solicitado ‘pay outs’ (parte del beneficio que se destina a la retribución del accionista) de cerca del 100% de sus ganancias previstas para el año que viene, por encima del 65% del pasado ejercicio.

Los principales bancos de Estados Unidos también superaron la primera fase de los tests, que trata de asegurar que, aún en un escenario de fuerte recesión, la gran banca mantendría capital suficiente para cubrir holgadamente los requisitos de los reguladores.