Por Luisa García Pelatti
Standard & Poor’s Ratings Services (S&P) degradó la clasificación de deuda del Banco Gubernamental de Fomento (BGF) de “CC” a “SD”: incumplimiento de pago selectivo (“selective default”). La decisión se produce después de que, durante el fin de semana, el gobernador Alejandro García Padilla declarara al BGF en estado de emergencia. La orden suspende temporalmente los desembolsos de préstamos y limita los retiros, pero no impone una moratoria. El próximo pago de la deuda del BGF es de $421.8 millones y se vencen el 1 de mayo. S&P está seguro de que el BGF no pagará.
A juicio de S&P la restricción del acceso a los depósitos constituye un incumplimiento de pago selectivo, según los criterios de la agencia. Con una liquidez de $560 millones al 1 de abril, S&P sigue creyendo que es “prácticamente seguro” que no hará el pago de mayo.
La clasificación podría bajar a “D”, si hay una suspensión de pagos, un intercambio de deuda o se declara una moratoria.