Foto: Sin Comillas

Por Luisa García Pelatti

A la Junta de Control Fiscal no la quiere nadie. Le llegan críticas por todos lados. La más reciente proviene del propio Congreso de Estados Unidos. Dos senador, Thom Tillis y Tom Cotton, enviaron el viernes una carta a la Junta en la que cuestionan que el Plan Fiscal certificado cumpla con la Ley de Supervisión, Administración y Estabilidad Económica de Puerto Rico (PROMESA, por sus siglas en inglés).

El Plan, señalan, no distingue entre gastos esenciales y gastos no esenciales. Además, los senadores ponen en duda que la Junta está interesada en negociar con los acreedores.

Los senadores se hacen eco de las quejas de varios acreedores de que la Junta no ha intentado negociar. El mes pasado, varios acreedores le escribieron a la Junta para pedir con urgencia el comienzo de las negociaciones.

La carta hace referencia a la reciente comparecencia de José Carrión, presidente de la Junta de Control Fiscal, ante el Comité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Los senadores no están satisfechos con las explicaciones dadas en esa vista sobre el cumplimiento del Plan con Promesa.

“No creemos que el Gobierno y la Junta de Control Fiscal estén interesados en resolver estos problemas”, indican. “Es más, estamos profundamente preocupados porque Promesa no esté en camino de lograr sus metas de promover la responsabilidad fiscal en Puerto Rico y devolver al Gobierno a los mercados de capital”.

Los senador quieren que la Junta les haga llegar una certificación de cumplimiento del Plan Fiscal, con detalles de cómo cumple con Promesa. También piden una reunión con sus asesores en Washington, D.C. y  que les informen sobre la situación en que se encuentran las negociaciones y con quién están negociando. Quieren saber, además, qué porcentaje de los ingresos el Gobierno está dedicando a pagar lo que se les debe “a los contribuyentes de Estados Unidos”.

Sens. Tillis and Cotton Letter to Chairman Carrion RE Fiscal Plan for Puerto Rico. 04.07.2017