Por redacción de Sin Comillas

Diez años después de la crisis financiera mundial, las perspectivas de una recuperación económicas sostenida siguen estando en riesgo. Esto se debe a la incapacidad generalizada de los líderes y encargados de la toma de decisiones de implementar las reformas necesarias para apoyar la competitividad y el imprescindible aumento de la productividad que esto provocaría, según los datos del Informe Global de Competitividad 2017-2018 del Foro Económico Mundial. 

Este informe es una evaluación anual de los factores que impulsan la productividad y la prosperidad de los países. Por noveno año consecutivo, su Índice de Competitividad Global (ICG) concluye que Suiza es la economía más competitiva del mundo, ligeramente por encima de Estados Unidos y Singapur. Otras economías que están entre las diez primeras son: Alemania (5), Reino Unido (8) y Japón (9). China es la mejor clasificada del grupo de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) subiendo un puesto hasta el 27. En Latinoamérica, los países mejor posicionados son: Chile (33), Costa Rica (47), y Panamá (50). Argentina (92) mejora 12 posiciones, Brasil (80) sube una posición y México (51) conserva la misma posición.

El informe fue publicado el 27 de septiembre, una semana después del paso del Huracán María, y aunque Puerto Rico no fue incluido en el informe oficial por razones de futuros cambios metodológicos, el Foro Económico Mundial sí calculó y comunicó los resultados para Puerto Rico a través de su afiliado local, el Instituto de Competitividad Internacional (ICI).

Puerto Rico se colocó en el puesto 39 y los resultados del estudio apuntaron a que, a nivel mundial, la Isla puede capitalizar su potencial competitivo a través del desarrollo de su ecosistema empresarial ya que goza de un alto potencial de innovación (22), marco legal de protección de propiedad intelectual (12), grado de sofisticación de procesos de producción (10), técnicas sofisticadas de mercadeo (20), calidad de suplidores locales (28) y la absorción y utilización de tecnología en empresas (28). El alto nivel de matrícula en instituciones de educación superior (sobre 84% de la población en edad universitaria), intensidad de competencia local (10) y nivel de desarrollo de los clústeres industriales (30) posicionó muy favorablemente a Puerto Rico entre los otros 137 países participantes.\

Constituye un gran reto para Puerto Rico, pre y post-María, el internacionalizarse y posicionarse entre los países de primer rango, indicó el Dr. Francisco Montalvo Fiol, Coordinador para el WEF en la Isla y Coordinador de la Coalición del Sector Privado. Además, Gloria Viscasillas, líder del movimiento EcharPalante, añadió que al mismo tiempo que se debe reactivar la economía y trabajar para cerrar la brecha socio-económica en la Isla.

Los factores históricamente problemáticos de despilfarro público (130), carga de burocracia gubernamental (135), los costos asociados con la alta tasa de criminalidad (80) y la calidad del sistema eléctrico (90) continúan impactando negativamente la posición competitiva de la Isla. La Isla sufre de la pérdida de profesionales –“brain drain” – retención de talento (70), y disponibilidad de capital de riego (64). El sector institucional continúa sufriendo de una percepción negativa (95).  La calidad de sistema energía eléctrica (90), el favoritismo en decisiones gubernamentales (90), la calidad de educación de ciencias y matemáticas (75) y la situación macroeconómica (deuda y liquidez gubernamental, entre otros factores), representan grandes retos competitivos para la Isla. Sobre este respecto, el Dr. Juan Carlos Sosa, Decano de la Escuela de Negocios y Empresarismo de la Universidad del Turabo, indicó que la innovación, talento humano y la ecosistema son pilares anti-crisis. La ineficiencia gubernamental y la calidad del sistema eléctrico son factores que limitan la inversión directa extranjera y tiene efecto en la competitividad de empresas existentes. Por su parte, Andria Salva, Presidenta de Puerto Rico 3000, opinó que en adición a factores macroeconómicos, los elementos de desarrollo social y ambiental también de tomarse en cuenta al analizar el potencial competitivo de la Isla.

El Índice de Competitividad Global para Puerto Rico fue desarrollado a través de una alianza entre el ICI de la Universidad Interamericana, Recinto de Bayamón y la Escuela de Negocios y Empresarismo de la Universidad del Turabo, Puerto Rico 3000 y el movimiento EcharPalante.