Por Luisa García Pelatti

La deuda de las familias se redujo 1.4% en el primer trimestre de 2018, un descenso de $470 millones, hasta $33,948 millones, según datos de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras. Cuando se compara con el trimestre previo la cartera de préstamos de los bancos cae 1.9%.

Desde 2008, cuando los préstamos alcanzaron un nivel récord de $63,315 millones, la deuda de las familias con los bancos se ha ido reduciendo.

Los préstamos hipotecarios (el 66% de la deuda en préstamos corresponde a hipotecas) disminuyeron 0.2%. Los préstamos comerciales, industriales y agrícolas retrocedieron 10.8% en el primer trimestre de 2018 y los préstamos personales perdieron 1.3%.

Las carteras de préstamos –que incluyen lo que las personas adeudan a los bancos por concepto de préstamos hipotecarios, personales, autos o tarjeta de crédito– habían estado creciendo a una tasa anual de doble dígito hasta principios del 2006, cuando empezó la recesión económica. Después, el ritmo de crecimiento se desaceleró y a partir del 2009 empezó a reducirse. La caída se profundizó a partir del segundo trimestre del 2010, coincidiendo con la primera consolidación bancaria y desde entonces no ha dejado de disminuir.

La cartera de préstamos se reduce en todas las instituciones hipotecarios con excepción de Banco Popular, donde los préstamos crecen 3.3%, la segunda alza consecutiva.

Por nivel de préstamos, la institución líder es Banco Popular con una cartera de $16,482 millones y una cuota de mercado de 49%.

FirstBank se mantiene a la segunda posición, con $6,367 millones y una cuota de 19%. Oriental se mantiene en tercera posición por nivel de préstamos, con una cartera de $4,197 en préstamos y una cuota de 12%.