Foto Lcda. Zoimé Álvarez Rubio

Por redacción de Sin Comillas

José Rafael Fernández, presidente de la Asociación de Bancos de Puerto Rico (ABPR) anunció el nombramiento de Zoimé Álvarez Rubio como nueva vicepresidenta ejecutiva de la entidad que representa a la industria bancaria ante foros económicos, políticos y sociales del país. De igual forma, Fernández informó que Arturo Carrión estará acogiéndose al retiro luego de 60 años de valiosa contribución a la industria bancaria de la Isla.

“Hoy celebramos la valiosa contribución de Arturo Carrión a la industria bancaria y le damos la más calurosa bienvenida a la licenciada Zoimé Álvarez Rubio a la Asociación de Bancos de Puerto Rico”, indicó Fernández.

Fernández resaltó la sólida experiencia profesional de Álvarez Rubio, en particular sus destrezas como administradora, tanto en la empresa privada como en el sector público. “La licenciada Álvarez Rubio es una experimentada ejecutiva con vasto conocimiento a nivel administrativo y experiencia en campos profesionales que van desde las leyes, la salud, el gobierno, hasta la industria de seguros, por lo que estamos seguros de que liderará exitosamente las labores de nuestra asociación y las encomiendas de su nuevo cargo a beneficio de la industria bancaria del país”, expresó el presidente de la ABPR.

Previo a incorporarse a la ABPR, Álvarez Rubio se desempeñó como directora de negocios de hospitales (Hospital Business Director) para Aon Risk Solutions of Puerto Rico, Inc. Ejerció la abogacía a nivel privado, tanto a nivel estatal como federal, y fungió como administradora de la Corporación del Fondo del Seguro del Estado de 2009 al 2013.

“Asumo esta nueva encomienda con mucho orgullo y con el entusiasmo de servirle a Puerto Rico a través de la industria bancaria, uno de los pilares principales de nuestra economía. Estoy consciente que la banca, así como el país, enfrenta grandes retos; pero al mismo tiempo reconozco que contamos con recursos de primera y el compromiso inquebrantable de una industria que trabaja unida en servicio y beneficio de nuestro pueblo” señaló Álvarez Rubio. La ejecutiva destacó que luego de la exitosa trayectoria de Arturo Carrión en la Asociación, la entidad amerita un proceso de transición que cuente con el espacio necesario para beneficio de todas las partes. Ambos ejecutivos trabajarán en conjunto este proceso que se extenderá hasta el próximo 30 de junio de 2015.

Fernández además destacó la inmensurable aportación de Arturo Carrión al desarrollo económico del país y a la industria que ha sido el eje de su carrera profesional. Por su parte Carrión manifestó que “ha sido un verdadero privilegio contar con la confianza y el apoyo de la industria bancaria por los pasados 29 años como vicepresidente ejecutivo de la Asociación y como miembro de la misma por espacio de 60 años. Ha sido un honor fungir como representante de los mejores intereses de la banca del país y de los consumidores a quienes les servimos. Durante las pasadas décadas hemos enfrentado grandes retos, pero así mismo hemos cosechado importantes logros. Mi compromiso con el bienestar económico y social de Puerto Rico sigue intacto y continuaré aportando a los mismos a través de diferentes iniciativas y oportunidades en el futuro. Gracias a todos los compañeros y colegas por su colaboración, solidaridad y compromiso con la labor que he realizado durante las pasadas tres décadas”.

La Asociación de Bancos de Puerto Rico (ABPR) es una entidad sin fines de lucro que representa a las principales instituciones financieras depositarias de Puerto Rico ante los foros gubernamentales, legislativos y ejecutivo, así como ante la comunidad en general. Entre sus objetivos está estimular la integridad y bienestar del sistema financiero puertorriqueño, promover y salvaguardar un clima de competencia entre sus asociados, ofrecer servicios financieros modernos a los clientes, y educar a la comunidad sobre las finanzas personales. La industria bancaria de Puerto Rico emplea a 11,678 trabajadores financieros.  Su infraestructura cuenta con 371 sucursales, unos 1,086 cajeros automáticos y 35,543 puntos de venta a través de toda la Isla para servir a cerca de dos millones de consumidores.