Por Luisa García Pelatti

En Puerto Rico gobierna una tecnocracia importada: la Junta de Control Fiscal y los consultores que están trayendo, principalmente de Estados Unidos. “Estamos importando una tecnocracia en el sentido estricto de un conjunto de expertos que asumen la responsabilidad de definir la política pública y desplazan a las personas electas para cumplir con esa función”, comentó el economista Juan Lara.

Y aunque se podría caer en la tentación de pensar en que hay que sacar a la tecnocracia importada y poner una tecnocracia  boricua, Lara advierte que esa no es la respuesta a la situación en la que estamos, y propone que economistas, ingenieros,  contadores, médicos y otros profesionales ayuden a que se gobierne mejor.

“Para nosotros los economistas, la tarea más importante es ayudar a definir una perspectiva realista de desarrollo económico para Puerto Rico”, señaló Lara quien recibió un homenaje durante la Asamblea de la Asociación de Economistas, celebrada el viernes.

“Los economistas estamos entre la notoriedad y el anonimato”. En un momento de crisis económica la gente está interesada en los temas económicos. “Somos notorios, la gente nos reconoce, nos escucha, les interesa lo que estamos diciendo”, pero esa misma gente que los reconoce en la calle les dice “qué pena que no les hagan caso”. “Somos notorios, pero también anónimos, no tenemos la proyección que deberíamos tener”.

El problema de tener una tecnocracia importada, como la Junta de Control Fiscal y su grupo de consultores, explica Lara, es que cuando se vaya de Puerto Rico, “aún si han sido exitoso en parte de su trabajo, no van a dejar una perspectiva de desarrollo económico, sin la cual este país no va a ser viable hacia el futuro”.