Heidie

Por Luisa García Pelatti

La emigración y la crisis de liquidez limitarán el crecimiento económico en los próximos años y no se espera una recuperación hasta el 2020, opina Heidie Calero, presidenta de H. Calero Consulting. En un artículo publicado en “Economic Pulse”, Calero analiza la situación actual y cómo podría desembocar en un estancamiento económico que podría extenderse durante unos años más, al menos, lo que significaría una década pérdida de crecimiento económico.

La reducción de la población, que es uno de los aspectos fundamentales de la actividad económica, afectará todo, desde el consumo a la demanda de viviendas, explica Calero, y dice que incluso pequeños cambios en la población tendría efectos significativos.

“Si continúa la actual política publica no cambia sustancialmente y sigue el deterioro a lo largo de año fiscal 2016, anticipamos que la tendencia demográfica negativa se mantenga y cree efectos permanentes similares a los que se experimentaron en Detroit, que perdió 271,000 personas entre los años 2000 y 2014”.

Con las condiciones actuales, la población seguirá reduciéndose a un ritmo de 2.3% al año hasta el 2019, cuando se estabilizará con una caída en torno al 0.5%. En este escenario base, el empleo seguiría cayendo y podría empezar a crecer a partir del 2021.

En un escenario alterno la población podría reducirse a un ritmo mayor si crece la demanda laboral en Estados Unidos, favoreciendo la emigración de puertorriqueños a Estados Unidos. En el caso de que la demanda laboral en Estados Unidos se desacelere, la emigración se reduciría.

La caída del empleo se traducirá en un estancamiento en el ingreso personal, se reducirá el número de contribuyentes, y por tanto los recaudos del fisco, lo que limitará la demanda por servicios públicos.

Calero considera que lograr un consenso con los  acreedores para la reestructuración de la deuda es crucial para conocer la magnitud de los recortes en los gastos del Gobierno. Y advierte que si no se consigue el balance correcto, el riesgo será que inevitablemente aumentará la emigración y se estarán limitando los cambios de política pública que se puedan llevar a cabo en el 2017.

Se necesitará “creatividad y coraje” sin importar quién esté a cargo del Gobierno.