UPR

Por Luisa García Pelatti

Moody’s Investors Service (Moody’s) degradó en dos niveles la deuda de la Universidad de Puerto Rico (UPR) de Baa2 a Ba1. Con este decisión, la agencia coloca los bonos de la UPR en la categoría de inversión de grado especulativo o “bono basura”. La decisión de Moody’s de degradar los bonos a la categoría de “basura” significa que la deuda tiene un alto riesgo de impago y que la UPR tendrá que pagar tasas de interés más altas si quiere emitir deuda.

La deuda permanece bajo revisión ante una posible degradación, lo que significa que Moody’s podría volver a degradar la clasificación en 90 días.

La degradación afecta a una deuda vigente de $599 millones. Esta degradación se produce después de que Moody’s decidiera degrada el jueves la deuda del Gobierno y del Banco Gubernamental de Fomento de Baa1 a Baa3, el nivel más bajo dentro de la categoría de grado de inversión.

En octubre, Standard & Poor’s (S&P) mantuvo sin cambios, en “BBB-”, la clasificación, con perspectiva estable.

La degradación de la deuda, que bajó dos escalones, se debe a la alta dependencia que tiene la UPR de los ingresos del Gobierno y de la liquidez del BGF. Moody’s destaca la limitada capacidad de la UPR para aumentar sus ingresos, dada la resistencia a aumentar los costos de la matrícula y a la crisis económica que limita la capacidad de las familias para pagar más.

Moody’s podría volver a degradar la deuda en 90 días si la UPR no consigue apoyo financiero del Gobierno o el BGF o si se reduce la matrícula. La agencia dice que tendrá que evaluar alternativas de liquidez por si el BGF no logra acceso a los mercados de deuda ante la degradación de su clasificación.

La matrícula se redujo en el 2010 y 2011 debido a la huelga de 62 días del 2010. En el 2012 la UPR informe que la matrícula ha aumentado a 57,045 estudiantes.

El informe de Moody’s es mucho más estricto que el de S&P, que hace dos meses destaca la labor de la UPR para estabilizar las finanzas del sistema universitario en los pasados dos años. S&P señalaba que la perspectiva de los bonos de la UPR es estable dado que se proyecta que durante los próximos dos años la demanda estudiantil por la UPR se mantendrá estable y que la institución continuará con el plan de estabilización fiscal actual, mejorando así sus activos netos.