Por Luisa García Pelatti

Los bancos se encuentran en su mejor momento. La rentabilidad financiera de los bancos, medida por el “Return of Equity” (ROE) antes de impuesto se situó en 7.1% en los primeros nueve meses del 2016, la más alta desde el 2006. Sin embargo, las medidas de austeridad que ha anunciado el Gobierno podrían aumentar la morosidad de las carteras. 

Joe Gladue, analista de Merion Capital Group, se muestra esperanzado en que la Junta de Control Fiscal resuelva los problemas de la deuda, pero opina que las medidas de austeridad podría poner en dificultades a empresas e individuos, lo que podría conducir a un aumento en la morosidad, que está en su nivel más bajo desde el 2008.

“Las soluciones de largo plazo podrían tener consecuencias negativas en el corto plazo”, advierte Gladue. “Creemos que es alentador el entorno más positivo desde la aprobación de PROMESA y las elecciones de Estados Unidos. Esperamos que la mejora continua de la calidad de los activos y la rentabilidad, junto con los avances en la solución de los problemas económicos de la Isla, ayudará a allanar el camino para devolver capital adicional a los accionistas en algún momento en el futuro”, dijo el analista.

No obstante, las pruebas de estrés muestran que Popular, Inc. (NASDAQ:BPOP) y First Bank Corp (NYSE:FBP), las únicas entidades financieras de la Isla obligadas a hacer las pruebas, muestran que podrán hacer frente a un escenario adverso.