Por redacción de Sin Comillas

Jerome Powell, designado por Donald Trump como candidato a ocupar la presidencia de la Reserva Federal de Estados Unidos compareció ayer ante el Senado como paso previo a su nombramiento oficial. Powell seguirá el camino marcado por su predecesora, Janet Yellen, y anticipa un aumento de las tasas en el mes de diciembre, la tercera subida del año.

El futuro presidente de la Fed no quiso dar su opinión sobre la reforma contributiva que se discute en el Congreso y señaló que el objetivo de la Reserva Federal es “conseguir estabilidad en los precios y máximo empleo”.

Powell aseguró, además, que no considera que los grandes bancos de Estados Unidos siguen siendo “demasiado grandes para caer”, después de las diferentes regulaciones aprobadas en los últimos años y aseguró que la reglamentación bancaria es “suficientemente estricta”.

Se espera que el nombramiento de Powell se apruebe sin problemas. Los demócratas votaron a Powell como miembro de la junta de gobernadores de la Reserva Federal en 2012 y 2014 a propuesta de Barack Obama, pese a su ideología republicana.