Por Luisa García Pelatti
Cambiar el Impuesto sobre Ventas y Uso (IVU) por un Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) de 16%, reducir las contribuciones a corporaciones e individuos y eliminar la patente nacional. Buscar una alternativa a los ingresos de la Ley 154 y cambiar la contribución sobre la propiedad. Esas son algunas de las recomendaciones que contiene el informe de KPMG sobre reforma contributiva.
También se recomienda descartar las exenciones y los tratos preferenciales que benefician a un número muy pequeño de contribuyentes; convertir la exención de intereses hipotecarios en un crédito; eliminar la contribución básica alterna y la patente nacional; y que las ganancias de capital tributen a tasas ordinarias.
El estudio, que costó $4.7 millones, se inició en marzo del año pasado y fue publicado el miércoles en la página de Internet del Departamento de Hacienda, obligado por una orden del tribunal en respuesta a una demanda de la Asociación de Periodistas.
El objetivo de las recomendaciones es tener un sistema que recaude más, que distribuya la carga de forma más justa y que sea más sencillo. Las simulaciones presentadas indican que los contribuyentes pagarán menos y la regresividad del IVA se compensará con créditos de más de $1,400 millones.
Cambiar el IVU por el IVA
La tasa de IVA de 16%, con una captación del 75% (la tasa de captación del IVU es de 56%), recaudaría $6,665 millones anuales. El IVU recaudó $1,326 millones en el 2014. De ahí saldrían los fondos –unos $1,420 millones– para compensar a los contribuyentes con ingresos más bajos por la regresividad del IVA. Otros $700 millones irán al Fondo de Interés Apremiante (Cofina), lo que deja unos $4,545 millones en el Fondo General.
El informe simula los recaudos de un IVA de 14% y 16% y contempla diferentes escenarios: dejando exentos los alimentos, las medicinas y los servicios médicos y educativos.
Lo que no está claro es cómo se va a manejar el periodo de transición. El IVA tarda de 18 meses a dos años en implementarse, por lo que no generará recaudos en el 2015 y 2016, pero en esos dos años costará casi $74 millones.
El estudio explica que se escogió una tasa de 16% para el IVA porque es la necesaria para alcanzar los recaudos que se quieren, para usar la contribución al consumo como mecanismo para reducir la carga de la contribución sobre ingresos y para reemplazar los recaudos que se pierdan con la eliminación de la patente nacional. El IVA no aplicaría a exportaciones de bienes y servicios; servicios financieros y servicio en hoteles.
Más de 800,000 contribuyentes no pagarán
Se simplifica la contribución sobre ingresos eliminando prácticamente todas las deducciones y exenciones, y se reduce drásticamente el número de contribuyentes que tienen que pagar. El informe recomienda que no paguen los contribuyentes con ingresos de $35,000 o menos (solteros), que se estima son 835,000 contribuyentes, el 82% de los que rindieron planillas en el 2012.
Proponen tres tasas contributivas: 15% para ingresos de entre $35,000 y $125,000 (solteros); 20% para ingresos entre $125,000 y $200,000; y 30% para ingresos por encima de los $200,000. Con estas tasas, la contribución sobre ingresos se reduciría de $1,979 millones a $1,409, un 28.8% menos o $570 millones.
Fuera deducciones y exenciones
Se recomienda eliminar la mayoría de las deducciones y evaluar algunas pocas, como las donaciones o los intereses hipotecarios. En el caso de los intereses hipotecarios, existe el miedo de que su eliminación afecte de forma adversa el precio de la vivienda. Pero si se mantiene la deducción, KPMG recomienda rediseñarlo para que reciban los beneficios los que más los necesitan. Tomaría la forma de un crédito contributivo, de manera que no aumente al mismo tiempo que aumentan los ingresos. El crédito se reduciría a media que aumenta el ingreso hasta eliminarse, porque los contribuyentes con altos ingresos no lo necesitan. Para los que tiene ingresos de menos de $35,000 se recomienda un reembolso.
El Gobierno se propone presentar un proyecto de reforma contributiva en o antes del 15 de febrero, que podrá contener todas o solo algunas de estas recomendaciones.
