Condor, filial de Thomas Cook, que vuela entre San Juan y Frankfurt una vez a la semana, informó que sus vuelos no se verán afectados.

Por redacción de Sin Comillas

Thomas Cook, el grupo turístico más antiguo de Reino Unido, se ha declarado en quiebra al no poder afrontar las demandas de sus acreedores para reforzar su liquidez de manera urgente. La compañía necesita con urgencia más de $200 millones. De manera inmediata, la empresa ha cancelado sus reservas, sus tiendas han sido cerradas y sus aviones han quedado aparcados.

La insolvencia de la compañía obligará a los reguladores de Reino Unido, Alemania y otros países a organizar la repatriación de unos 600,000 clientes que Thomas Cook tiene en diferentes destinos turísticos. El proceso se podría demorar hasta dos semanas.

El Gobierno británico no quiso rescatar al grupo, al entender que se trata de un negocio privado. Sin embargo, el costo de la repatriación de los 150,000 clientes británicos que ahora están de vacaciones puede exceder esos $200 millones. El regulador aéreo de Reino Unido está en alerta para organizar el regreso de los viajeros, en un plan que ha sido bautizado como Operación Matterhorn.

La aerolínea alemana Condor, filial de Thomas Cook y que vuela a Puerto Rico, ha comunicado que continúa operando con normalidad y no se ve afectada por el cese de operaciones de Thomas Cook.

 

El Brexit y la depreciación de la libra, el auge de las reservas de viajes por Internet y la fuerte competencia están entre las razones de la quiebra de Thomas Cook, que arrastra más de $2,000 millones de deuda. La empresa fue fundada hace 178 años emplea a unos 22,000 empleados.