Joseph Stiglitz. (Foto: Sin Comillas)

Por Luisa García Pelatti

La imposición de medidas de austeridad en economías profundamente maltrechas como la de Puerto Rico, tiende a agravar el declive económico y a recrudecer las depresiones. Esto, a su vez, limita la capacidad de cumplir con el servicio a la deuda y desencadena un espiral de reestructuraciones, mayor austeridad y empobrecimiento. Ese fue el principal mensaje del economista Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía en el 2001, durante su conferencia “Deuda, austeridad y crecimiento: hay otro camino”.

Stiglitz se ha convertido en un portavoz de la crisis fiscal de Puerto Rico en Estados Unidos, mediante la publicación de artículos sobre el tema y la participación en conferencias. Recientemente, ha sido nombrado miembro de la Comisión de Crecimiento para Puerto Rico del Centro para una Nueva Economía, que busca identificar maneras para promover el crecimiento a largo plazo.

El economista defiende una reestructuración profunda de la deuda y usar ese dinero para lograr crecimiento económico. La idea es convencer a los acreedores de que les conviene que la economía crezca porque de esa forma se podrá pagar una parte mayor de la deuda. También apoya que se haga una auditoría de la deuda. “Es importante para los ciudadanos que no sienten que (la deuda) es legitima”.

“El plan actual es un desastre”, dijo, refiriéndose al Plan Fiscal aprobado por la Junta de Control Fiscal. “Cualquier cosa sería mejor que eso”. Stiglitz cuestionó las proyecciones económicas contenidas en el informe, porque subestiman el impacto, y dijo que no ofrecen “mucha credibilidad”. Calificó de “draconianos” los recortes requeridos para la Universidad de Puerto Rico.

La junta debe poner el crecimiento económico como la prioridad, dijo Stiglitz. Se necesita un plan económico para recuperar el crecimiento y la reestructuración de la deuda debe ser parte de ese plan.

Lo que propone la Junta de Control Fiscal es “más draconiano que en Grecia”, dijo. El Plan Fiscal “no debería ser políticamente aceptable y va a causar mucho daño”. Cree que la contracción económica será mayor que el 17% que estimó originalmente la Junta de Control Fiscal.