Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal

Agencias

La Reserva Federal de Chicago y de San Francisco han coincidido en la posibilidad de que la Reserva Federal adopte nuevas medidas de estímulo para reanimar el crecimiento de EEUU. Sin embargo, la de St. Louis ha subrayado que para aportar nuevas medidas es necesario que la economía se deteriore “mucho más”.

En la última reunión de la Reserva Federal hace dos semanas, su presidente Ben Bernanke apuntó a posibles nuevas compras de bonos hipotecarios en caso de que la actual política acomodaticia no sea efectiva. El martes, el presidente de la Fed de Chicago, Charles Evans, ha dicho que con el débil crecimiento económico y con el alto nivel de desempleo en EEUU “los bancos centrales deben fortalecer su orientación sobre la duración de los tipos de interés muy bajos”. Evans ha apuntado que es posible que se mantengan en estos niveles incluso después de mediados de 2013, fecha hasta la que la Reserva Federal ha prometido que los mantendrá.

John Williams, presidente de la Reserva Federal de San Francisco, también ha apostado por introducir nuevos estímulos para impulsar la economía “si el desempleo se mantiene en niveles altos, junto a un crecimiento moderado y una baja inflación”.