Por Luisa García Pelatti

Las semanas previas a las elecciones el mercado de bonos municipales estaba especialmente preocupado (Invertir o no invertir en Puerto Rico: esa es la cuestión) ante la posibilidad de un cambio de Gobierno en la Isla. Alejandro García Padilla ganó las elecciones, una gran pérdida para las firmas de inversión, que apoyaban mayoritariamente las políticas del gobernador Luis Fortuño. Los inversionistas institucionales tienen unos $52,000 millones en deuda de Puerto Rico.

En los días previos a las elecciones, Gobierno y grandes firmas de inversión hicieron frente común para hacer su particular campaña en los medios de comunicación especializados. Resultado de eso es un artículo titulado “In Puerto Rico, a Governor Pushes Big Change”, publicado por The Wall Street Journal un día antes de las elecciones o el publicado en Bloomberg News.

A los inversionistas les mata la incertidumbre de no saber qué va a hacer García Padilla con las reformas fiscales de Fortuño, un gobernador pro-empresas, según publica Chicago Tribune, “Puerto Rico’s new governor a question mark for bonds”. Los inversionistas se preguntan si el Gobernador electo mantendrá políticas como la privatización de carreteras y el aeropuerto, resolver la crisis del Sistema de Retiro o reducir el déficit presupuestario.

“Sabemos muy poco sobre las políticas que propondrá el gobernador entrante, y esta incertidumbre es un factor crediticio negativo para los bonos”, dijo Alan Schankel, analista de Janney Capital.